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Crítica de música

La cuerda de las galaxias

El mismo día que la comunidad científica daba la noticia del descubrimiento de un planeta tres veces mayor que la Tierra y a una distancia de seis años luz orbitando alrededor de Barnard, la estrella más cercana al sol, nuestra Orquestra Simfònica nos ofrecía una muy loable interpretación de Los Planetas de Gustav Holst, en la que brillaron (nunca mejor dicho si hablamos de estrellas) todas las secciones de la formación, tanto en los momentos líricos y poéticos como en los clímax sonoros que el compositor exige en muchos momentos.

Esa obra llenó toda la segunda parte en la que también colaboraron las voces de esa magnífica coral de mujeres nacida en el sí de la familia vocal universitaria y que dirige Lidia Fernández. La intervención coral que pide Holst no es muy extensa, pero sí definitiva ya que aporta ese punto poético al final de la obra.

Antes, pero, dos obras románticas, la Obertura Las Hébridas de Mendelssohn, que el músico compuso después de una visita a las islas escocesas y el Concierto para violín y orquesta de Brahms, en la que destacó el solista invitado para la ocasión, Ray Chen, uno de los violinistas más solicitados del momento. Su agenda le llevará, en tan solo unas semanas, a realizar nada menos que ocho conciertos en veinte días. Y en lugares tan emblemáticos como el Auditorio de Madrid, El Auditorio de Dublín, el Royal Festival Hall de Londres o la Gran Sala de conciertos de Lucerna. Cosa normal si nos atenemos al sonido que pudimos escuchar la otra noche. Espectacular, un sonido realmente mágico, a través de una afinación exquisita, una técnica de primer nivel, una musicalidad fuera de toda duda i una cierta, (¿demasiada?) impulsividad. Su Brahms fue muy interesante. Y lo fue también el acompañamiento instrumental. La cuerda estuvo muy, pero que muy bien. Especial referencia a los pizzicatos de los contrabajos. Pero sin olvidar los vientos, con un magnífico Javier Arnal y un dúo de clarinetes muy equilibrado.

Orquestra Simfònica de Balears

Auditòrium de Palma

****½

Ray Chen, violín

Cor de dones UIB (Lidia Fernández, directora)

Pablo Mielgo, director

Obras de Mendelssohn, Brahms y Holst

15/11/18

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