El escultor Andreu Ferrer Mir (1940) falleció el pasado viernes en su Santanyí. El artista, cuya obra se puede ver estos días en una exposición que acoge la Casa de Cultura Ses Cases Noves del citado pueblo, encontró en la 'pedra de Santanyí' a su mejor aliado para trabajar.

Desde el pasado 14 de septiembre y hasta el próximo 22 de diciembre, Ses Cases Noves (carrer S'Aljub, 22, de Santanyí) muestra una selección de sus obras, bajo el título Fang, bronze i pedra de Santanyí.

Hijo de un artesano de la 'pedra de Santanyí', Ferrer Mir tuvo varios maestros en su juventud, entre ellos Cosme Covas y Remígia Caubet. "En 1968 recibió una visita en su taller que cambiaría su mundo. La escultora Remígia Caubet quedó fascinada por dos figuras de payeses, que ella imaginó que jugaban a cartas. No solo las quiso comprar sino que le animó a participar con ellas en el Salón de Tardor en el Cercle de Belles Arts", puede leerse en el catálogo de la citada exposición.

Con el tiempo logró varios premios, entre ellos el del Círculo de Bellas Artes de Palma, y participó en importantes encuentros como el Salón de las Naciones de París.

En 1985 mostró su obra en la feria Interarte de Valencia y en 1990 logró notoriedad con una exposición erótica en la Roch Minué.