Después de publicar diez poemarios, Eva Baltasar empezó a escribir una novela "por casualidad". Aunque no fue por casualidad que las páginas de su debut novelístico se vieran empapadas por una voz de lo más poética, pues la autora apunta que la poesía "ha sido mi formación durante 15 años".
Esa voz, que es la de la protagonista, utiliza todo tipo de metáforas durante la seductora y adictiva narración que propone Baltasar. La palabra que da título a la obra, permagel, además de plantear un interrogante a la mayoría de personas que la lean, ya es una metáfora "muy bonita" de la situación de la protagonista. "Permagel no es agua ni hielo, sino pedazos de tierra que están permanentemente congelados. Se encuentran en lugares muy fríos", explica la escritora. En este contexto, ilustrar perfectamente el escudo con el que se protege la protagonista de la obra, una mujer lesbiana, suicida, que miente para "sobrevivir" y que "se deja llevar por la vida sin oponer resistencia".
Aunque no se trate de una autobiografía, la escritora reconoce haberse entregado a su "heroína": "Me he puesto en su piel y, aunque no sea autobiográfico, sí que suscribo muchas de sus opiniones. Podríamos decir que me he quedado a gusto", comenta, divertida, Baltasar. Y zanja el tema: "Siempre te inspiras en cosas que te han pasado para construir una historia, pero Permagel es pura ficción".
En tan solo ocho meses, pues el libro vio la luz el pasado marzo, ya se han publicado seis ediciones. Asegura que no se esperaba el éxito, porque "tampoco esperaba nada". Así, sigue "sorprendida" por su acogida e, intentando descubrir donde está la clave de este triunfo, comenta la narración en primera persona siempre ayuda a que el texto convenza más. "Aunque la protagonista mienta mucho, es muy honesta con el lector y consigo misma. Dice cosas que la gente piensa pero que no se atreve a decir", algo que transmite confianza al lector y hace que se identifique con ella. Aunque la mentira en general no esté bien vista y sea considerada como "el gran pecado", a la protagonista de la poeta le sirve para enfrentarse a una realidad que le es, se podría decir, hostil: "Hay pecados muy placenteros, mentir va muy bien muchas veces", aclara la autora de Permagel.
El sexo, la maternidad no deseada, la masturbación femenina, el suicidio, la muerte, las relaciones familiares, la mentira son algunos de los temas que se tratan en la novela de Baltasar. "No ha sido algo que haya razonado mucho. Si hablaba de sus relaciones sexuales durante su madurez me pareció que no tenía sentido no explicar el origen de esta sexualidad", apunta. "Me dejé llevar por la escritura, y yo misma me sorprendía", cuenta.
'Boulder' y 'Mamut'
A Eva Baltasar no le han bastado las casi 200 páginas de Permagel para hablar de todo lo que desea. Así, esta novela es la primera de un tríptico de ficción. "Serán tres novelas que se complementan entre sí, sin que la voz sea de la misma protagonista. Son tres mujeres diferentes en distintas situaciones". Los títulos, Boulder Bouldery Mamut,Mamut son "metáforas de las mujeres que hablan". Mamut será el primero en llegar a las librerías, aunque la autora no se quiere arriesgar a decir cuándo.
