Por primera vez en Palma hemos podido escuchar una de las formaciones instrumentales de reciente creación en la isla y que ya ha conquistado auditorios de diferentes localidades mallorquinas.
Se trata de la Orquestra de Cambra de Mallorca nacida como iniciativa de su director titular Bernat Quetglas. Con él y escuchado el concierto del pasado sábado en Sant Felip Neri bien podemos decir que ha nacido una estrella. Quetglas, si sigue por ese camino de la musicalidad exquisita, no es que tenga un futuro asegurado como director, tiene un futuro asegurado como director de primer nivel. Bernat Quetglas domina perfectamente la dirección sinfónica, sabe sacar de sus músicos un sonido equilibrado, preciso, afinado y, por estos motivos, excelente. Pura delicia su Concert Romanesc de Ligeti que nos llegó como una obra fresca, llena de sorpresas sonoras, rítmicas y melódicas. Un Ligeti tonal que puede y debe escucharse más a menudo.
Pero la sesión había empezado con esa obra cumbre del repertorio para piano y orquesta como es el Concierto Emperador de Beethoven. Y aquí, al buen hacer de la orquesta debemos añadir otro valor, el del solista, Andreu Riera, quien buscó y encontró una lectura diferente de la conocida partitura. Riera supo imprimir un énfasis distinto a las frases melódicas, por lo que nos ofreció un Emperador nuevo, con unos acentos curiosos y nunca antes escuchados. A pesar del piano. Sí, no podemos calificar con cinco estrellas el concierto debido al piano. El instrumento no ayudó a la audición, mejor le puso pegas. Con otro piano estaríamos hablando del mejor concierto instrumental ofrecido este año por intérpretes mallorquines.
Es difícil adelantar acontecimientos, pero será muy difícil que el Emperador Beethoven II que escucharemos en unos meses dentro de la programación de la Simfònica supere esta audición tan soberbia.
Después de la beethoveniana obra y de los consiguientes aplausos, Andreu Riera interpretó un delicado preludio de Chopin, La gota de agua, y lo dedicó a los damnificados de Sant Llorenç. También la orquesta tuvo que repetir un movimiento de la obra de Ligeti, pues el público, puesto en pie, no dejaba de aplaudir.
Concierto Emperador
Sant Felip Neri de Palma
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Orquestra de Cambra de Mallorca
Andreu Riera, piano
Bernat Quetglas, director
Obres de Beethoven y Ligeti
13-10-18
