El posible encarcelamiento del rapero de Lleida Pablo Hásel depende de un recurso ante el Tribunal Supremo. Aunque la Audiencia Nacional rebajó su última condena de 2 años y un día por enaltecimiento del terrorismo a 9 meses, el catalán señala que, por condenas anteriores, entrará en la cárcel si el Supremo no le absuelve. Asegura que la noticia puede llegar en cualquier momento, pero su agenda sigue activa. Mañana estará en Palma en la diada Sí a la culturaorganizada por la Obra Cultural Balear a las 20 horas en la Plaça París de Palma.

P Su situación es similar a la que vivió Valtonyc. ¿Se ha planteado qué hará si finalmente tiene que entrar en prisión?

R Lo he meditado mucho y pienso que podría ser más útil en prisión, aquí en España. Creo que aunque mi caso se parezca al de Valtonyc, se tienen que analizar por separado. Igualmente, considero que puedo hacer más daño al Estado desde la cárcel, porque mi encarcelamiento puede generar más conciencia y desenmascarará otra vez al régimen. Será más útil que el exilio. Si pudiera estar con otros revolucionarios de aquí me iría pero, aunque respeto la decisión de Valtonyc, yo no me sentiría cómodo con la burguesía independentista. Además, si todos nos fuéramos no quedaría nadie aquí que luchara.

P ¿Tiene miedo a ser olvidado?

R No. No me monto películas. Igual que si me encarcelan pienso que se generará más conciencia no me imagino manifestaciones masivas para que me liberen. Los primeros días sería todo muy mediático, pero luego quedarán unos pocos trabajando día a día y denunciando mi situación. Me quedo con esto, no con la parte mediática, aunque también se puede aprovechar para dar a conocer nuestras causas. Creo que cada vez hay más conciencia. Voy dando charlas y conciertos por el país y veo que cada vez hay más personas con conciencias despiertas que se organizan.

P Habla de la burguesía independentista. ¿No es simpatizante de su causa?

R Sí, estoy a favor de la república catalana y lucho por ella. Pero no soy independentista, porque un independentista lo es en cualquier situación y yo no. Lo soy ahora porque estamos delante de un estado fascista que niega derechos fundamentales democráticos, como la autodeterminación, y la independencia conseguiría debilitar al Estado y favorecería al movimiento revolucionario de todo el Estado. Igualmente, soy consciente de que no se conquistaría una república mucho más justa que este país con la burguesía catalana al frente. Esquerra Republicana, PdCat, Junts per Catalunya, la CUP, se han rendido a la primera de cambio. Han engañado al pueblo. Aun así, seguiré reivindicando la libertad de todos los encarcelados y los exiliados que lo están injustamente.

P ¿Usted cree que el fascismo está campando a sus anchas?

R Sí. El fascismo de la calle tiene impunidad porque los tribunales, la policía, todo el Estado piensa y actúa como ellos. Si la Guardia Civil o la Policía Nacional dan palizas como las del 1 de octubre no irán a por aquellos que luchan contra el indepentismo con violencia. Esta impunidad es el resultado de un Estado que no tuvo una ruptura con el fascismo durante la falsa Transición. No se juzgó a los fascistas, que ahí siguen. Hay que conocer el pasado más reciente de este país para entender por qué padecemos esta represión en la actualidad.

P ¿La palabra fascista se usa muy a la ligera?

R A aquellos que no consideran que esto es un estado fascista les diría que el fascismo se adapta a los nuevos tiempos. Y que no siempre necesita fusilar. Ahora mismo no hay una resistencia antifascista fuerte como para que ellos tengan que recurrir a la violencia. Ahora el fascismo se manifiesta de una manera más sutil, como los encarcelamientos. Al final, el fascismo es negar derechos y libertades democráticas por la fuerza. Y esto es lo que hace el Estado y quien le apoya. Un claro ejemplo de fascismo es el 1 de octubre. El derecho democrático se violó con violencia. Fue fascismo puro y duro.

P ¿Cuál es su ideal de país?

R La Unión Soviética del principio.

P¿Y lo ve viable?

R Sí, y se demostró que lo es. Para conquistarlo la lucha es larga y costaría esfuerzos y sacrificios. Pero se trataría de un país, o una unión de países donde estén garantizados todos los derechos dignos. A veces se habla del derecho a la vivienda, pero no es solo esto. Es el derecho a una vivienda digna. A un trabajo digno. De nada sirve el derecho al trabajo si te explotan. Además, no se participaría en guerras imperialistas porque un pueblo no puede ser libre si oprime a otros pueblos.

P Imagino que está a favor de la libertad de expresión pero ¿para todos?

R Es muy importante no hablar en abstracto. Cuando hablamos de libertad de expresión no podemos poner al fascista y al antifascista al mismo plano. El fascista quiere negar derechos a la clase obrera, a los homosexuales, inmigrantes, mujeres... Nosotros luchamos por todo lo contrario. No se tiene que tolerar el fascismo porque este no tiene tolerancia con nuestros derechos.

P Póngame un ejemplo.

¿Se tiene que respetar la libertad de expresión de Jiménez Losantos diciendo que hay que bombardear Cataluña para frenar el independentismo? No. Losantos está apoyando que se asesine a personas que quieren ejercer el derecho a voto. Nosotros atacamos a quien nos niega estos derechos.

P ¿Qué es lo mejor de España?

R (Ríe). Supongo que el clima y el paisaje, cosa que no es ningún mérito del Estado.

P ¿Y lo peor?

R La ausencia de derechos y libertades fundamentales.

P Sin derechos ni libertades, la gente se movilizaría.

R Sí, pero está dormida, porque sino no se podría sostener este régimen. Pero, como decía antes, hay personas que están despertando poco a poco. Por esto el régimen aumenta la represión, algo que, aunque sea duro, es una buena señal. Para mí, esta represión es una señal de debilidad del Estado más que un síntoma de fortaleza.

P La justicia belga ha negado la extradicón de Valtonyc poniendo en duda la justicia española. ¿Tiene esperanzas?

R Creo que ahora se empezarán a pensar las cosas varias veces porque muchas personas se dan cuenta de este abuso de poder y eso los pone nerviosos. El rechazo a este régimen cada vez aumenta más. Pero, a la vez, son fascistas y su esencia es la represión. Creo que, en mi caso, no dudarán en encarcelarme.

P ¿Existe una solidaridad real, o solo hay solidaridad en Twitter?

R Hay solidaridad real, pero tendría que ser mucho más grande para que sea práctica. Hay muchos simpatizantes con nuestras causas y nuestras situaciones. A mí me para mucha gente en la calle para darme ánimos, pero luego montas una manifestación y no vienen. Por supuesto que hay muchos tweets, pero bueno. Lo que le puede quitar concesiones al régimen es la solidaridad real, que se puede manifestar de muchas formas. Desde el terreno económico, por ejemplo, para cubrir los gastos de los procesos judiciales, las campañas, el exilio o la estancia en prisión, que también cuesta dinero. También el terreno de la denuncia organizando charlas o manifestaciones.

P ¿Se han sentido apoyados por el mundo del arte, que siempre parece ser el más reivindicativo?

R El apoyo del mundo del arte ha aumentado, porque cuando fui detenido por primera vez, en 2011, no hubo tanto revuelo. Sin embargo, el mundo del arte no deja de ser un reflejo de la sociedad: es un mundo muy individualista. Hace falta recibir y sentir mucho más apoyo para decir que el mundo del arte está con nosotros. Es muy triste ver como artistas que van de comprometidos no son solidarios con sus hechos, cuando muchos de ellos tienen los medios para organizar una protesta o un concierto solidario, lo que sea.

P ¿Después de todo, piensa dos veces en decir algo en una canción?

R Hay una pequeña parte de autocensura, porque sino dentro de una hora tendría la Guardia Civil en la puerta de mi casa. Pero hay cosas que no estoy dispuesto a no denunciar, como la monarquía, la venta de armas a Arabia Saudí, a no solidarizarme con los presos políticos antifascistas? Todo esto me llevará a prisión, pero lo continuaré diciendo porque, si no lo hiciera, además de no estar reflejando la realidad en mis canciones, me estaría traicionando a mí mismo y mi mensaje sería inofensivo. Yo no quiero ser inofensivo, yo quiero ser peligroso para nuestros enemigos.

P Aznar

R Pues quizás no hace falta, porque tiene dignos sucesores de su cargo. Pero esta gente es tan egocentrista que se debe pensar que será el salvador. Tiene sucesores dignos que siguen fielmente su legado.

P Usted siempre habla de la venta de armas del Estado a Arabia Saudí, algo que, entre otras atrocidades, conlleva la muerte de refugiados en el mar. ¿La sociedad es cómplice de esto?

R Si hay refugiados es porque en sus países hay guerras, que son evitables. Si no tuviéramos el Estado que tenemos no participaríamos en estas guerras y no seríamos cómplices. Hay niveles de complicidad. Yo, que denuncio estas guerras imperialistas, soy cómplice porque pago impuestos con los que se participa en ellas. Pero soy menos cómplice si lo denuncio y lucho por un Estado que no participe en estas guerras. Solo acabando con la raíz del problema se podrá acabar con el drama de los refugiados.

P ¿Es posible un mundo sin guerras?

R Como he dicho antes con la libertad de expresión, creo que no se puede hablar en abstracto. No es lo mismo una guerra para invadir un país y saquear sus recursos como la guerra de la población de Vietnam para defenderse de la incursión de los Estados Unidos en su territorio. Habrá guerras contra los que quieran imponer la explotación o el saqueo de recursos. Y siempre habrá imperialistas. A no ser que todo el mundo sea comunista.

P La palabra comunismo da miedo a algunos y hace gracia a otros.

RHay muchas personas que dicen ser anticomunistas pero no lo son, solo son ignorantes porque no saben lo que es el comunismo. Solo tiene sentido que sea anticomunista una persona explotadora, por ejemplo, porque los comunistas luchan contra la explotación. Una persona que es humilde no tiene que tener miedo al comunismo. A no ser que sea fascista. Hay quien dice que el comunismo está anticuado. Bueno, si todavía hay desigualdades abismales entre todos, explotación, hambre, guerras, etc. Si todo esto existe, el comunismo no puede estar anticuado porque el comunismo lucha contra esto. Es luchar para que todos y todas tengamos una vida digna. Y como esto no es posible en este sistema, nuestra lucha tiene plena vigencia y mucho sentido.