Tras el éxito de las dos primeras ediciones, los organizadores del Festival Insòlit -los jóvenes arquitectos Aina Bigorra, Erik Herrera y Pep Rovira- apuestan por consolidar la apertura de los patios del casco antiguo de Palma para que durante cuatro días (del 11 al 14 de julio) los vecinos y vecinas puedan disfrutar de estas obras del patrimonio mallorquín y verlas transformadas en verdaderas intervenciones efímeras realizadas por autores internacionales.

La selección de este año de los autores que realizarán las intervenciones ha contado con más de 80 propuestas. El alto nivel de los participantes ha dificultado la elección por parte del jurado que, finalmente, ha escogido cinco que se podrán visitar durante los cuatro días del festival. Además de los cinco equipos seleccionados, el festival contará con la colaboración de los alumnos de la Escola d´Art i Superior de Disseny de les Illes Balears que realizarán una sexta intervención, recuperando uno de los objetivos del festival: dar visibilidad a los jóvenes creadores isleños.

Además del aumento de participantes en la preselección, esta tercera edición tendrá novedades destacadas durante los días del festival. Parte de la consolidación de la apertura del patrimonio de Palma se ve reflejada en el aumento de patios que tendrán intervenciones durante los cuatro días del festival. El Estudi General Lul·lià y Can Balaguer serán dos de los lugares donde se encontrarán muchas novedades e intervenciones efímeras. Estos dos espacios se suman a los patios de Can Oms, Can Bordils, Cal Comte de la Cova y Cal Marquès de la Torre.

Un año más el Insòlit cuenta con el apoyo de diversas instituciones como el departamento de Cultura del Consell de Mallorca, impulsora del proyecto, el Ayuntamiento de Palma, la UIB o el Col·legi Oficial d´Arquitectes, así como la colaboración de otras entidades y empresas locales.

El festival se inaugurará este miércoles 11, en el patio del Estudi General Lul·lià a las 12 del mediodía. Todos aquellos que quieran participar en la inauguración podrán disfrutar de un pequeño recorrido por algunos de los patios y la degustación de un vermut.