La obra del canario Juan Carlos Batista llega al Casal Solleric de Palma con la exposición Carne Triste, una mirada a nuestro alrededor en la que la libertad de expresión, la guerra o la violencia contra la mujer son protagonistas. Artista multidisciplinar, a través de esculturas, híbridos y cuadros, muestra su "decepción con el criterio de los hombres a la hora de tomar decisiones que afectan a todos" y muestra su esperanza en la figura de la mujer, que "tras años siendo pisoteadas serán quienes nos rescaten ahora".

Para su primera exposición en Balears, Batista ha creado obras nuevas como una escultura que mezcla un rifle de francotirador con Elmer Gruñón, el cazador de dibujos que perseguía a Bugs Bunny, con la que pretende desmitificar una infancia en la que la violencia está demasiado presente y a la que no se le da importancia. "Es ahí cuando los niños, sobre todo en Estados Unidos, aprenden que cazar es divertido y llevar armas, normal".

Otras de las nuevas obras recuerda una caricatura de Franco publicada en 1936 en La Traca, que provocó el fusilamiento del artista y del director de la revista.

De hecho, la guerra está muy presente en la exposición, a través de esculturas que parecen árboles pero que "cuando el espectador se acerca, se da cuenta de que en realidad es el humo provocado por las bombas en zonas bélicas".

De Realidad casi humo, su última exposición en Canarias, ha rescatado una serie de fotografías de lugares románticos retocadas con imágenes de trincheras y soldados, "porque incluso durante la paz, la guerra siempre está latente en la sociedad".

El regidor de Cultura Llorenç Carrió destacó que con esta propuesta buscan "unir el arte contemporáneo con una parte social". Por su parte, la comisaria artística Mercedes Estarellas hizo hincapié en la melancolía del trabajo de Batista y su "capacidad para asumir la realidad" y "del desastre, sacar la belleza".

Juan Carlos Batista es uno de los referentes canarios del arte contemporáneo. Desde su primera exposición en 1999, ha llevado su obra desde Canarias a ciudades españolas como Barcelona, Madrid o Zaragoza y a otros países como Portugal y Francia. El artista se traslada de una técnica a la otra, por lo que se pueden encontrar desde dibujos y fotografías a esculturas y collages digitales.

La manipulación de los medios de comunicación, el deporte, la ecología y la naturaleza humana son otros temas presentes en su obra. Carne Triste se inaugurará hoy a las ocho de la tarde y estará en el Casal Solleric hasta el 9 de septiembre.