"Cuando mantienes las cosas cerradas, en secreto, el día que ven la luz son más puras". Este es el motivo por el cual el creador mallorquín no quiere desvelar nada sobre lo que pasará el próximo sábado en la Plaza Canal de Santanyí, el pueblo donde vive desde hace ya unos cuantos años.

Lo que sí que cuenta es que es "algo que ha nacido libre", a la vez que "es como abrir todas las ventanas de mi casa y mostrar lo que guardo en el corazón". Tampoco esconde que lo que presentará le ha costado dos años de trabajo en solitario, algo que le ha permitido conectar con la tierra y con el mundo de los payeses. Adrover considera que lo que se verá en La mort amb prebes torrats puede considerarse como algo que ha hecho de manera "autosuficiente y autodidacta, porque he desarrollado algo que no había hecho antes".

El de Santanyí asegura que vendrá mucha gente de Nueva York y que el acto será internacional: "Hoy en día no es necesario hacer las cosas en una gran capital para que la gente las pueda ver", apunta. Además, comenta que "hay gente interesada en qué el trabajo viaje a Nueva York y Londres, pero yo me sentía con la obligación de presentarlo aquí, porque es donde ha nacido y crecido el proyecto".

Adrover revolucionó las pasarelas con unas colecciones muy críticas con la industria de moda. El sábado a las 19 horas se descubrirá si sigue utilizando la vestimenta como "arma" de expresión.