La obra War and Turpentine ( Guerra y Trementina), escrita y dirigida por el autor y artista belga Jan Lauwers y protagonizada por la consagrada actriz Viviane de Muynck, una de sus musas, llega mañana a la Sala Gran del Teatre Principal, a las 20.00 horas, de la mano de la compañía de vanguardia Needcompany.

La obra, estrenada por primera vez en España en complicidad con el Teatro Central de Sevilla, donde ha hecho escala el fin de semana, es una epopeya que cuenta una infancia vivida en las trincheras de la Primera Guerra Mundial y la pérdida prematura de un amor. Un espectáculo que combina música, danza y teatro, mediante once intérpretes de siete nacionalidades diferentes, con texto en inglés sobretitulado en castellano y catalán, definiendo así la línea multicultural y multidisciplinar de sus creadores.

Jan Lauwers, que fue galardonado con el León de Oro de la Bienal de Venecia 2014 por su trayectoria, ha creado de nuevo un papel a medida de De Muynck, experimentada actriz de teatro y cine europeo, con la que ya contó en Isabella's Room (2004). El autor ha elogiado su personaje "que mantiene durante dos horas el peso del montaje". Una actuación respaldada por una danza energética y un trío de piano, violoncelo y violín, que interpretan música compuesta para la ocasión por Rombout Willem, elementos que aportan tensión y dialogan en la dramaturgia.

War and Turpentine tiene el sello de la compañía belga Needcompany, del que Lauwers es uno de los pilares. Una residencia de artistas fundada en 1986 con más de 30 obras en su currículo, que según ha comentado el director del Teatre Principal, Carlos Forteza, "fue la protagonista en los 80, del cambio radical de la escena belga, con un teatro concreto, directo y visual". Esta creación fue estrenada el pasado mes de diciembre en Amberes (Bélgica), y España es la segunda parada de su gira europea.

Una adaptación personal

War and Turpentine es la adaptación escénica personal que Lauwers hace del libro Guerre et thérébenthine, de Stefan Hertmans, reputado escritor, poeta y ensayista belga, cuya obra ha sido traducida a 24 idiomas. Se trata de la historia de un soldado que el escritor basó en el diario de su abuelo: un hombre que quiere ser pintor y cuyas aspiraciones se truncan por el conflicto bélico. "Quería crear belleza y, al contrario, hacía el mal; se acabó suicidando", relata el director.

Una obra con la que tanto Lauwers como De Muynck se sintieron "identificados" desde el principio, dado que sus respectivos abuelos participaron en la guerra, dejando secuelas importantes en sus familias y en una gran parte de la población belga. El arte es substituido por la muerte, "el hombre nunca llegará a ser artista", lamenta el director.

Jan Lauwers crea un papel a medida a la actriz, basado en un personaje del libro "que hace grande". Ambos coinciden en que "es mucho más que un monólogo, hay muchas energías al mismo tiempo". Una puesta en escena "postmoderna", que equilibra drama y arte, y se acerca más "a la performance que al teatro", ha observado el autor. De Muynck, por su parte, ha destacado que es "una historia muy humana, que narra la violencia, la tristeza de la vida". Y añade "es una obra que no funciona con cualquier director, sólo puede funcionar con un artista", devolviéndole el elogio a Lauwers. Una mirada al pasado y también al futuro, que pretende rememorar la historia desde una óptica diferente, próxima al contexto audiovisual actual.