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Libros

´Color de nube´, el cuento infantil que rima con el cielo

El autor Javier Matesanz publica esta creación con la colaboración de la ilustradora barcelonesa Jorgina Juvé

Las nubes y sus colores son los protagonistas de este libro infantil.

Hay personas que convierten las emociones en algo, o que saben utilizar su momento vital para crear. En el caso del escritor y periodista de Eivissa, Javier Matesanz, las emociones se han convertido en un libro infantil, Color de nube, publicado por la editorial Òrbita, que codirige junto con Natàlia Rebassa y Vicente García.

Las páginas que guardan las palabras de Matesanz están llenas de color gracias a los pinceles “digitales” de Jorgina Juvé, la ilustradora barcelonesa que ganó el concurso que la editorial convocó en Facebook para ilustrar el cuento. Matesanz confirma que tanto él como sus compañeros de la editorial se sienten “muy satisfechos con el trabajo de Juvé”, y explica como anécdota que trabajaron a distancia y que no se desvirtualizaron hasta el día de la presentación del cuento, el pasado día 21 de diciembre.

La dedicatoria más especial

El autor, que ya tenía experiencia en literatura infantil, e incluso preadolescente, asegura que de los libros que ha escrito este es el que es para un “público más pequeño”, lo que relaciona con su actual etapa vital, pues va a ser padre de una niña en unos meses y es a ella a quien le ha dedicado estas páginas que descubren a los más pequeños los colores que pueden tener las nubes.

“Supongo que vivir este momento me ha ayudado a encontrar una historia por contar y a convertir mis emociones en un cuento”, comenta Javier Matesanz sobre su situación actual, previa a la paternidad. No obstante, el eivissenc aclara que no tiene preferencias a la hora de escribir literatura infantil o adulta, ya que “a mí lo que más me gusta es contar historias”.

Las nubes y sus colores son los protagonistas de la última creación de Matesanz. “Las nubes son algo tierno, suave, algo muy imaginativo, con aspecto juguetón”. Así es como el eivissenc describe el elemento del cielo que le ha inspirado para escribir las rimas del libro, que hablan sobre los colores que pueden tener las nubes cuando, por ejemplo, hay tormenta, que “son marrones y se llaman nubarrones”.

El autor revela que cuando escribe para un público infantil siempre busca, precisamente, “la rima, versos sencillos para que suene como una cancioncita y sea más apetecible para los niños”. Apetecible y casi comestible, como las nubes que, adivina adivinanza, “comen mucho azúcar y se van de fiesta a las ferias”.

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