Diario de Mallorca

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Crítica de arte

El Diocesano se atreve con el cómic y acierta

Reinterpretación de Linhart. a. f. h.

Apócrifos.

El Diocesano ilustrado

Museo Diocesano de Mallorca

* * * *

Clúster de Còmic i Nous Media de Mallorca. Comisarios: Catalina Mas, Sonia Delgado y Juan Roig. De lunes a viernes de 10 a 17.15 h. (hasta octubre), sábados de 10 a 14.15 h., domingos y festivos cerrado. Hasta finales de octubre. 3 euros (2 euros para residentes).

El obispo Campins creía que el Museo Diocesano, del que fue impulsor, no debía ser un lugar limitado a almacenar cosas preciosas, sino "un centro vivo de cultura artística" en donde "se recibirá vida y crecerá el arte". Su frase ha marcado sin duda el devenir no sólo de dicho museo, sino de la relación de la misma catedral con la cultura contemporánea a su época. No exenta de polémicas, la catedral ha ido incorporando sin complejos intervenciones de grandes artistas coetáneos como Gaudí y más recientemente Barceló, dando muestra de mayor inteligencia y amplitud de miras que ciertos sectores de la sociedad mallorquina más conservadora.

Digna heredera de esta concepción progresista en la que el arte contemporáneo es entendido como interlocutor válido para conectar con los intereses y necesidades de la sociedad a la que se quiere llegar para instruir y adoctrinar (no hay que olvidar que por muy moderna que sea, la Iglesia es lo que es), se presenta la muestra Apócrifos. El Diocesano ilustrado en el Museo Diocesano de Mallorca.

La exposición, realizada en colaboración con el Clúster de Còmic i Nous Media de Mallorca, se fundamenta en la reinterpretación e incluso intervención de algunas de las principales obras de la colección permanente del museo. Dieciséis destacados ilustradores isleños han aceptado el difícil reto de dialogar con determinadas obras paradigmáticas de arte religioso. El humor, el ingenio, la ironía, la libertad de creación y la estética divertida y actual han sido las herramientas utilizadas por los artistas para intentar acercar y hacer más inteligibles las históricas obras seleccionadas.

Un ejemplo de ello es la propuesta de Jaume Balaguer, uno de los valientes encargados de mediar entre el mensaje religioso y los atónitos visitantes, quien presenta a una Clara de Asís en cama, entusiasta pero convaleciente espectadora de un programa de televisión protagonizado por un mediático Jesucristo, ilustrando así, con un lenguaje cercano y ameno, la historia de esta patrona de la televisión y las telecomunicaciones. En el empeño de hacer de la exposición un lugar atractivo y abierto a nuevos públicos, la sugestiva museografía de la muestra juega un papel decisivo, en la línea de la cuidada estética de las exposiciones llevadas a cabo por el Diocesano.

Ya en sus últimos días, esta muestra es una de las propuestas más interesantes y atrevidas del actual panorama expositivo de Palma, por lo que su visita resulta obligada para aquellos amantes no sólo del arte religioso, sino también del cómic y de la buena cultura en general.

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