Hay quien piensa que la oferta cultural por sí sola crea demanda, público. Y que incluso el aumento de dicha oferta comporta una subida inmediata de su calidad. Y que en esta cadena de producción todos salimos ganando. Piiiiiiii. Falacia. Que en la isla vayan a celebrarse tres grandes eventos culturales el próximo fin de semana, la Nit de l´Art, las Converses Literàries de Formentor y Fira B!, una clarasobreoferta, y que nos lo vendan como una muestra del enorme músculo cultural que luce Mallorca no se ajusta a la realidad. La situación no es boyante. Precariedad, fragmentación y mucha torpeza en la gestión cultural que ya no cabe debajo de la alfombra. El resultado final es una escasa infiltración de la cultura en la ciudadanía y muy poca confianza en su poder de transformación social. Dicho esto, no hay que confundir la crítica o la dirección de este dardo: está muy bien trabajar y construir proyectos, que duren años y se consoliden, pero ha llegado el momento de saber y analizar por qué y cómo se levantan todas estas propuestas. Qué hay detrás. Si hay que revisarlas. Si es positivo que se celebren todas durante el mismo fin de semana. Si hay público suficiente. Las inercias. Y sobre todo si realmente significan que todo es tan lustroso como quieren hacernos ver. En cualquier caso, da la sensación de que no hay coordinación cultural, de que hay foros excluyentes e ideologizados y de que la cultura sigue por estos lares sin un rumbo colectivo y sin libreto (¿llegará a serlo el Plan de Cultura?). Pese a ello, disfruten de la oferta si tienen herramientas para hacerlo (ésta es otra) porque hay bastantes propuestas que valen la pena. En definitiva: hemos perdido el rumbo pero no la rumba.
