Cerca de 3.000 personas llenaron la noche del sábado el recinto del Mallorca 'n' Roll, en el cuartel General Luque de Inca, para recibir las visitas de grandes exponentes del punk como Bad Religion, Toy Dolls o Gatillazo. El público, que ocupaba prácticamente la totalidad del recinto, coreó enérgicamente los pegadizos estribillos de las bandas, que ofrecieron su repertorio en un gran escenario que hizo vibrar a la ciudad mallorquina en todo momento.

Los americanos Bad Religion materializaron el momento álgido de la noche. Abrazados por una gran tela trasera con la cruz prohibida, el símbolo del grupo, ofrecieron pasada la medianoche un ambicioso repertorio que fue recibido con los brazos abiertos de un público que ya ocupaba la totalidad del concierto y que coreaba efusivamente las letras de los referentes del punk americano, que ofrecían su primer concierto en Mallorca.

Abrieron la noche con American Jesus, uno de sus temas más conocidos, y ya se desató la locura. En el concierto estuvieron presentes los pogos, los bailes en círculos que caracterizan a los grupos de punk, y el público a cuestas de la gente, que emergían desde un punto del centro del recinto y eran llevados, como si de un surfista se tratara, hasta el foso delantero. Los vasos lanzados hacia arriba, y cargados con restos de bebida o cubitos de hielo, tampoco faltaron.

El grupo fue gastando los cartuchos de su repertorio con temas como Atomic Garden, I Want To Conquer The World o Generator, con mucha energía a pesar de su ya avanzada edad, cosa que no les hizo bajar el ritmo en ningún momento. También hubo tiempo para las bromas entre canción y canción. Tras hablar de Mallorca y sus impresiones de la isla, bromearon sobre un foodtruck ubicado en el fondo del recinto con forma de bus. "¿Qué hace ese bus turístico ahí?, exclamaron. El público, entregado de principio a fin, coreó los estribillos melódicos que caracteriza a los americanos. A medida que iban terminando, los temas más reconocidos y esperados fueron apareciendo. Acabaron la velada con las míticas Punk Rock Song, Handshake, Infected y Fuck Armagedon. Un concierto que, para los fans acérrimos del punk y de Bad Religion, a parte de único, fue memorable.

El gran tridente de la noche empezó a sonar a partir de las 22.30 horas, con la actuación de Gatillazo, la reivindicativa banda vasca liderada por Evaristo Páramos, ex La Polla Records, que ofreció sus rápidos y contundentes temas entre reivindicaciones sociales ante un público que ya empezaba a acomodarse a lo largo de todo el recinto.

Los ingleses Toy Dolls cerraron la parrilla de grupos con su fugaz e intenso repertorio y luciendo sus características gafas rectangulares que llevan vistiendo desde hace más de treinta años ya. Ya a las 3.15 de la madrugada y habiendo culminado ya las actuaciones de los grupos en este frenético Mallorca 'n' Roll, los djs Unclu Garrot animaron la noche hasta el cierre.

La velada había arrancado con The Goodness, el joven power trio de punk mallorquín, que desplegó un repertorio enérgico que calentó el ambiente para recibir a Main Line, otro grupo local que esta vez ofreció un show más hardcore. La primera gran apuesta de la noche vino de la mano de No Children, un grupo afincado en la isla que tuvo gran acogida a nivel nacional y que no ofrecía un concierto desde 2011. La banda ofreció su repertorio más punk para la ocasión, y dejó de lado trabajos como su último disco Souls on fire, con vertientes más progresivas. Le siguieron las dos primeras apuestas internacionales: CRIM, la banda de punk de Tarragona, que ofreció su repertorio mientras el sol ya empezaba a esconderse, y Donots, el grupo alemán que llegaba a Mallorca tras vender todas las entradas en un concierto en Ibbenbüren, su ciudad natal.