Nueva York se prepara para dar la bienvenida a Antoni Literes (1673-1747). El compositor artanenc, uno de los principales autores barrocos, "redescubierto" en 2003 por el musicólogo felanitxer Antoni Pizà gracias a la catalogación de sus obras y del conjunto de cantatas inéditas encontradas en el archivo de la catedral de Guatemala, es uno de los atractivos de la programación de la New York City Opera (NYCO) para este 2017.
Este teatro, que forma parte del complejo del Lincoln Center y está situado junto al gran Metropolitan Opera (Met), ha programado para el próximo mes de mayo (días 4, 5, 6 y 7) Los elementos, de Literes, obra que, como bien recuerda Pizà, "no es exactamente una ópera estrictamente hablando (no hay ni acción ni dramaturgia) pero incluye algunas de las arias más bellas del barroco español".
Pizà, autor de Antoni Literes: introducció a la seva obra (volumen publicado en 2002), director de la Foundation for Iberian Music y profesor del programa de doctorado en música en el centro de posgrado de The City University of New York, además de colaborador de DIARIO de MALLORCA, ha sido determinante a la hora de que Literes entrase en la programación de la NYCO. Fue él quien aconsejó a la dirección del teatro la elección de Los elementos. "Lo más importante es la belleza de la música, especialmente el tratamiento de la voz. Las arias de Literes están a la altura de cualquier compositor del siglo XVIII pero también hay razones prácticas: es corta y como no tiene argumento en el sentido tradicional, el director de escena tiene total libertad para recrear la dramaturgia", explica Pizà.
Los elementos, descrita por el propio Literes como una "ópera armónica al estilo italiano" y dedicada a los duques de Medina de las Torres, se representará en castellano, con el fin de acercarla al público hispano residente en Nueva York, donde habitan alrededor de cuatro millones de personas que hablan español, "un público que hay que cultivar", apunta Pizà.
La NYCO, que lanzó las carreras de figuras como Samuel Ramey, Sherrill Milnes o Beverly Sills, y que otorgó al tenor Plácido Domingo su primer gran éxito en la ciudad de Nueva York en 1966, antes de debutar en el Met, con el papel principal del Don Rodrigo de Alberto Ginastera, se declaró en quiebra en 2013. Dos años después fue adquirida por una organización no lucrativa denominada New York City Opera Renaissance, que decidió relanzarla y reiniciar su actividad hace ahora exactamente un año.
Desde entonces han desfilado por su escenario Tosca de Puccini; Aleko, de Rakhmaninov; Pagliacci, de Leoncavallo; y Fallujah, de Tobin Stokes. En unos días lo hará Candide, de Leonard Bernstein; y le sucederán La campana sommersa, de Ottorino Respighi y, ya en mayo, Los elementos de Literes. Angels in America, de Peter Eötvös, pondrá la guinda a la presente temporada.
La página web de la NYCO anuncia Los elementos, escrita por Literes en 1713, como "un drama alegórico, compuesto para la corte de Felipe V, marcado por sus características melodías y sus ritmos alegres".
Su puesta en escena en Nueva York es "una buena noticia para nuestra música", destaca el pianista Miquel Estelrich, ex director del Conservatori Superior de Música de Balears, centro que en 2002 concedió la medalla de honor, por su compromiso con la recuperación de la obra de Literes, al director de orquesta Eduardo López Banzo, uno de los nombres que se ha barajado para la dirección de Los elementos, aunque finalmente no ha fructificado su contratación.
"Literes es uno de los grandes del Barroco, pero todavía sigue siendo un autor poco conocido. Esperemos que este estreno en Nueva York sirva para promocionarlo a nivel internacional", señala Estelrich.
