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Música

El 'boom' de las DJ's, las chicas llegan para quedarse

Su proliferación en las cabinas es un hecho. Ellas lo achacan a una mayor visibilidad motivada por diferentes cuestiones. Se mueven por locales nocturnos, discotecas y terrazas, participan en eventos para mujeres artistas e incluso cruzan fronteras

El 'boom' de las DJ's, las chicas llegan para quedarse c.v

Si Eivissa es la isla de los DJ's, Mallorca no podía ser menos. En la isla también están de moda y en versión femenina. Mag Demarco, Aina Losange, Kate Donovan y Paula Serra son algunos de los ejemplos. Dan guerra en locales, festivales y terrazas desde que comenzaron su andadura con los platos y la mesa de mezclas.

La mallorquina Paula Serra fue la única DJ española que pinchó en Tomorrowland, el conocido festival de música electrónica celebrado en Bélgica tras ser seleccionada entre más de 2.000 DJ'S europeos. La joven califica esta experiencia como "la mejor" de su vida: "Es un sueño para muchos y a mí me ha llegado muy pronto", reconoce. Mag de Marco, Kate Donovan y Aina Losange frecuentan diferentes bares de Palma como el Sabotage y el Maraca, en los que las tres hacen carrera desde hace varios años. También muestran debilidad por los festivales y actos al aire libre. Las cuatro pincharon en la fiesta llamada Mucha Muchacha celebrada en agosto en Sa Possesió (Palma) y en el que se aglutinaron mujeres artistas procedentes de diferentes ámbitos.

Iniciadas en el mundo de la música de maneras diferentes, Mag Demarco explica que comenzó a pinchar, junto a un compañero "porque hacía tiempo" que no podían "salir de marcha" ya que no les gustaba ni la música ni el ambiente. Fue entonces cuando decidieron tomar riendas en el asunto. Se empezaron a mover por locales de su pueblo natal, Campos, hasta que un día decidieron probar suerte en Palma. No les fue nada mal y justo en ese momento Demarco decidió pinchar sola por "una casualidad" y también porque le apetecía probar nuevos estilos.

En la música casi por casualidad

Losange empezó porque "un amigo abrió una discoteca" y pensó en ella para pinchar allí. Cuando el local cerró, siguió su trayectoria en otros establecimientos y sus amigos le regalaron una mesa de mezcla, que es la que utiliza actualmente. Tras un parón, retomó su pasión recientemente y ahora también pincha con un compañero. Donovan es la más veterana. Empezó hace unos ocho años cuando el dueño de un local que frecuentaba la joven le ofreció pinchar en la sala. Afirma que fue un hecho fortuito y que todo se gestó "medio en broma" pero que ahora se han abierto muchos locales en Palma y hay "nuevas posibilidades".

Paula Serra lo hizo porque le "picaba la curiosidad". Todo lo tuvo más fácil cuando empezó con su actual pareja, saxofonista y productor musical. Le regaló una controladora y ella se limitó a empezar a "jugar". Tras subir un video en YouTube fue cuando la joven recibió una oferta que no pudo rechazar y dejó su vida para dedicarse profesionalmente a la música. "Me tiré al pozo con eso", confiesa.

A la hora de subirse al set, Demarco afirma que es "muy de improvisar", Donovan sigue en la misma línea y dice que todo es mejor "en el momento que fluye". Explica que eso sucede "cuando más te sale de dentro y más lo sientes". Demarco añade que también es importante el estado de ánimo y que el público "lo nota". Losange confiesa que para ella, lo más importante para que una sesión funcione es "sentirla y disfrutarla". En cambio, Serra apuesta por "sentirse una más de la sala" y ponerse en la piel del público pensando "cuál es el próximo tema que les gustaría oír y con qué intensidad".

"El gusto musical y conocer mucha música" son las claves para ser un buen DJ, según Demarco. También dice que es importante "ser coherente". Aclara que con eso no quiere decir que solo ponga temas que le gusten al DJ, sino que es "la capacidad de coser bien las diferentes canciones para que quede bien la sesión". Donovan añade que también es fundamental la versatilidad y la "capacidad de adaptarse a diferentes formatos". "Constancia y mucho trabajo" dice Serra que es la clave. Aunque después "conectar con el público es algo que tienes o no".

Sobre los sitios en los que se mueven más cómodamente, Donovan y Serra coinciden en que se sienten muy cómodas en el formato de día. Serra frecuenta terrazas mallorquinas desde sus inicios, aunque aspira a pinchar en clubes, mientras que Donovan ha ido compaginando los shows de día con otras actuaciones en lugares tan dispares como exposiciones y locales nocturnos. Por esta última opción es por la que se decantan Demarco y Losange: "Yo, si puedo pinchar de tres a seis de la madrugada, no lo haré a mediodía", sentencia Demarco, que afirma que su relación con el mundo de la música "es un enamoramiento" que todavía no se le "ha pasado", ya que se pone nerviosa cada vez que tiene que pinchar. Afirma tener un poco de "pánico escénico" y que no le gusta estar demasiado expuesta en sus sesiones: "Si estoy a un palmo del suelo mejor que si estoy a un metro". A Losange no parece importarle demasiado esta cuestión ya que afirma "estar en su planeta" en cuanto se pone a pinchar. "Aunque es verdad que miro al público, pero si noto que están a gusto yo sigo con lo mío".

Un 'hobbie' y una profesión

Demarco, Donovan y Losange se dedican al mundo de la música como afición, ya que cada una conserva su profesión. Demarco es profesora de inglés, Donovan se dedica a la producción audiovisual mientras que Losange compagina sus estudios en Diseño de Moda con su trabajo de estilista. Serra dejó su puesto de trabajo en Hostelería hace dos años, en cuanto le surgió la oportunidad de dedicarse profesionalmente a ser DJ. Actualmente se le puede ver pinchando en terrazas de diferentes hoteles de la isla, mientras que a Donovan, Losange y Demarco se les pude ver en bares de Palma en invierno, como el Lisboa situado en el barrio de Santa Catalina, el Club Maraca y el Sabotage; en verano, también en algún festival al aire libre.

Serra sabe lo difícil que es vivir de esto, aunque es consciente de que a ella le ha ido todo "súper bien", aunque ahora le queda por delante una ardua tarea: "Una vez que lo has conseguido es más difícil aún mantenerlo", sentencia. Losange, Donovan y Demarco tienen una visión diferente al tratar el mundo de la música como un hobbie. Donovan afirma que "nunca ha buscado nada", ya que conserva su profesión y ya le va "bien así" haciendo lo que le gusta porque "disfruta", a lo que añade que si encima proporciona unos ingresos extras, "bienvenidos sean". Coincide con Losange que lo hace "porque disfruta la música" y no porque se quiera "dedicar a esto de manera profesional". Por su parte, Demarco reconoce que para ella pinchar supone "ir de marcha pagada", aunque le "hubiese gustado mucho aprender a hacer música y producir", porque la música es lo que más le gusta "en el mundo, más que cualquier cosa, sin ninguna duda".

Sobre la abundancia de las mujeres DJ, las cuatro jóvenes coinciden en que siempre ha habido chicas pinchando en la isla, lo que tal vez ahora sí que tengan una mayor visibilidad. "Igual nosotras hemos dado un poco más de guerra", afirma Donovan. "Yo tengo la sensación de que los chicos DJ han medio desaparecido, sobre todo en la escena indie", explica Losange, mientras que Demarco sostiene que es algo "fortuito", a lo que añade que "es una moda que pasará, como todas". Respecto a la diferencia que pueda haber entre un hombre y una mujer a la hora de pinchar, las chicas lo tienen claro, desde el factor de la "sensibilidad para la música que pueda tener una mujer", hasta el hecho de que las chicas "bailan más"y "tienen menos prejuicios".

Serra cree que lo que pasa es que ahora las chicas tienen "más protagonismo" y que en unos años estará muy equiparado el número de hombres y el número de mujeres DJ.

En lo que no coincide este grupo de chicas es en los estilos de música que ocupan sus sesiones. Mientras que Donovan se definine como "la más indie" y con un estilo "más definido". Demarco empezó poniendo estilos más variados, aunque ahora se decanta más por el "hip-hop, acercar otros estilos diferentes y eleminar los prejuicios". Losange decide su forma de pinchar dependiendo del sitio en el que se encuentre: "Me gusta la música en general y por eso me sale pinchar diferentes estilos", explica. Serra, por su parte, opta por el soulful ya que es "donde cabe más música instrumental", y por el house.

Con sus similitudes y diferencias, las chicas ya se han hecho un hueco en el mundo de los DJ's y lo aprovecharán hasta que el cuerpo aguante.

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