Mientras la Organización Mundial de la Salud señala el descenso en las cifras de fumadores tradicionales, la industria del cigarrillo electrónico parece crecer con rapidez por todo el mundo. De hecho, la reciente noticia publicada en Fox News por Mike Stobbe, destaca que, en Estados Unidos, este último año se ha duplicado el uso de cigarrillos electrónicos entre los adolescentes, cifras que son mucho más significativas que cualquier otra sustancia. A su vez, la noticia publicada en ABC por Nuria Ramírez, también destaca el aumento de su uso en España, cifra que ronda las 400.000 personas.

Los expertos explican que este mayor uso de los cigarrillos electrónicos se debe a la creencia de que tales son menos perjudiciales y que sirven de ayuda para intentar dejar de fumar. De hecho, la encuesta internacional lanzada por la consultora “Ernst&Young” afirma que casi la mitad de usuarios lo utiliza para intentar desengancharse del tabaco. Los médicos, frente este argumento, recuerdan la creación de nuevos adictos y que el compuesto de la nicotina sigue estando presente en algunas de sus variedades, sustancia que es realmente dañina para el cerebro de las personas, especialmente en jóvenes en edad de crecimiento.

La preocupación de esta nueva costumbre va más allá de que se estén creando adictos. Los investigadores explican que los vapores de estos aparatos son en sí mismo dañinos: dañan las células del sistema inmune y aumentan la inflamación de los pulmones, por lo que su uso sigue siendo peligroso.

Al ser una sustancia relativamente nueva, aún no se pueden observar sus efectos nocivos. Aún así, David Thickett, investigador de la Universidad de Birmingham, afirma que las alteraciones que padecen los pulmones pueden observarse fácilmente tras vapear durante 48 horas, por lo que se prevén problemas respiratorios graves a largo plazo, en aquellas personas que hagan uso de los cigarrillos electrónicos.

Además, los médicos también alarman el uso de estos cigarrillos electrónicos como un primer paso en el consumo de tabaco y el cannabis, por lo que pueden significar una facilidad más al inicio de su consumo. De hecho, en Estados Unidos está aumentando la costumbre de inhalar cannabis a través de estos aparatos electrónicos.

En opinión del Dr. Carbonell, el desconocimiento de las nuevas sustancias y los efectos de su consumo es una cuestión de alarmante importancia. El uso de estos cigarrillos es cada vez más común y sus efectos negativos deberían ser más conocidos entre nosotros. El objetivo de este blog es poder ofrecer información contrastada y romper mitos como este, pues los cigarrillos electrónicos dañan los pulmones y aquellos que contienen nicotina afectan de forma perjudicial al cerebro. Además no hay que perder de vista que pueden significar un instrumento de inicio en el consumo de otras drogas.

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