Los gestos de la cara, la forma de hablar y los movimientos corporales pueden determinar cómo será nuestro contacto directo con otras persona, ya que es el reflejo de cómo es nuestra autoestima.

La autoestima influye en todas las áreas de nuestra vida, aunque no nos demos cuenta. Pequeños gestos reflejan cómo somos y cómo nos gustaría que nos vieran. Una de las características que nos puede ayudar a mejorar nuestra autoestima es el carisma.

Ser una persona carismática significa tener la habilidad de tratar con la gente, de ser simpáticos. Tener la facilidad de que nos escuchen y caer bien a los demás. Esta habilidad se puede aprender o potenciar, ya que nos ayudará a mejorar el autoconcepto y la autoestima, influyendo en nuestro bienestar y éxito personal. A continuación, os proponemos una serie de ejercicios para trabajar nuestro carisma:

1) Dedica tiempo para ti

A veces solemos dedicar tiempo a actividades que no nos gustan o a personas que no nos aportan nada positivo. Para invertir mejor nuestro tiempo, se puede hacer un listado de las actividades donde dedicas tu tiempo a lo largo de la semana. Cuando la tengas debes preguntarte: ¿dedicas demasiado tiempo a cosas que no te hacen sentirte bien? ¿tienes tiempo para ti mismo? Recuerda que cuanto más te gustes a ti mismo y te parezcas interesante, más fácil es que los demás perciban lo mismo. Además al hacerlo te vas a sentir mejor y así transmitirás mayor carisma.

2) Equilibrar nuestra imagen interna como externa

Debemos potenciar ambas partes. Los conocimientos, intereses y habilidades son igual de importantes que nuestra forma de vestir y de cuidarnos.

3) La importancia de la comunicación no verbal.

No esquivar la mirada cuando tenemos una conversación nos puede ayudar a transmitir mejor el mensaje. Un ejercicio para practicar es intentar mirar a los ojos a las personas con quienes tenemos más contacto diario.

Por lo tanto, trabajar habilidades como el carisma, nos ayudará a mejorar nuestra autoestima, la imagen que tenemos de nosotros mismos y a desenvolvernos mejor con los demás.

En opinión del Dr. Carbonell, todo aquello que nos ayude al crecimiento personal mejorará la salud mental y nos hará más fuerte frente a las adversidades.