Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Narrativa

El libro de Jonah

La historia de un converso con ecos bíblicos narrada por Joshua Max Feldman

Joshua Max Feldman, autor de ´El libro de Jonah´.

La reinvención es una virtud admirable. Saltar del tren que nos arrastra en su carrera, abdicar de las circunstancias de una vida que creíamos feliz y completa, pero que nos condena al vacío más ominoso de todos, el que anida dentro de nuestro corazón. El libro de Jonah, de Joshua Max Feldman, revisa esa posibilidad al valerse de su homónimo veterotestamentario, el Jonás a quien Yahvé ordenó predicar en la pagana Nínive, libro que, desde el punto de vista narrativo, dada su fuerza novelesca, quizá sea el más admirable de los textos protagonizados por profetas.

Jonás, es decir, Jonah, es ahora un joven abogado judío de éxito que aspira al dinero, el prestigio, el poder y el amor (al mismo tiempo) de dos mujeres. Educado en un ambiente liberal, hombre sin prejuicios y a su manera tolerante y honesto, la fortuna sonríe a Jonah en su periplo por Nueva York, el ombligo del mundo, hasta que un día, de forma abrupta, comienza a sufrir alucinaciones, prolepsis de su vejez y de la vejez de la metrópoli en la que habita. Lo que Jonah anticipa en esas visiones es uno de los lugares comunes del Antiguo Testamento: la vanidad de lo humano, máxime si ese orgullo se concreta en bienes tangibles.

En la novela de Feldman, la ballena está representada por Ámsterdam, puerto de exilio y reconciliación con uno mismo tras la renuncia al lucro del mundo, y Nínive, el retorno al becerro de oro y a sus adoradores, el destino al que Yahvé envía a Jonás a pregonar su lección escatológica, se encarna en la (anti)ciudad por excelencia, Las Vegas, un lugar que encierra el simulacro más intenso dentro de un mundo que ha hecho del simulacro una pandemia, la plasmación más aguda, insensata y brutal de la condición posmoderna entendida como el choque entre la plétora material y el vacío de sentido.

En El libro de Jonah, que sigue de forma bastante fiel las estaciones de su primitivo inspirador, asistimos a la historia de un converso, pero en la novela, cosa que no sucede en el texto seminal, juega un papel decisivo una mujer, alguien que, también a su modo, ha vivido otro de los lugares comunes de la tradición bíblica: el castigo en apariencia desproporcionado, la fatalidad sin objeto, la prueba de fuerza que el creador administra a capricho para sus criaturas. Del encuentro entre un hombre que ha dimitido de su vida y una mujer que ha renunciado a la suya, surge el propósito de enmienda de esta peripecia, la lección de humildad, el esfuerzo y la posibilidad de reinvención mencionados al principio. Que este esfuerzo y esta posibilidad se articulen mediante la puesta al día de uno de los más antiguos mitos literarios, instala con fuerza y seguridad a Feldman en la tradición que decanta nuevos vinos en viejos odres. El caldo, salvo por cierto regusto en exceso edificante que deja el último trago, se bebe con gusto.

JOSHUA MAX FELDMAN

El libro de Jonah

Traducción de Damià Alou

ASTEROIDE, 432 P., 24,95 €/E-B., 14,99 €

Compartir el artículo

stats