«Tranquilidad». Eso es lo que le transmite Ingo Volckmann, presidente del Atlético Baleares, a su entrenador. Pese al nefasto arranque del conjunto blanquiazul durante el presente curso –solo han sumado tres puntos de 15 posibles–, Jordi Roger confía «en el trabajo» de su equipo para dar la vuelta a la situación y sumar el primer triunfo frente al Alcoyano, actual líder de la clasificación. 

«Toca competir y sacar los tres puntos, pero lo bueno del fútbol es que cada semana tienes una reválida. Evidentemente estoy fastidiado porque trabajas para ganar, pero lo único que depende de mí es el trabajo, después si la pelota entra o no el domingo ya es más complicado... De todas formas, hablo cada día con el presidente y me transmite mucha tranquilidad. Lo único que puedo hacer es trabajar y trabajar», resumió el preparador catalán al ser cuestionado por su futuro.

El conjunto blanquiazul se mide este domingo, a las 12 del mediodía, frente al Alcoyano, «un equipo siempre difícil, independientemente de la posición que ocupe en la tabla». Frente a los alicantinos Roger no podrá contar ni con Jesús Álvaro, ni con Canario, sancionado y, finalmente, tampoco estará en El Collao, el hispano-brasileño Lucas de Vega: «Tenemos a Lucas de Vega con el tobillo mal y también la baja de Jesús Álvaro, que está en la enfermería. Damián Petcoff ya estuvo convocado la semana pasada y creemos que está listo para tener minutos, poco a poco, es un refuerzo de lujo para nosotros». 

«Con el Baleares me he enfrentado a ellos una vez como entrenador y otra como secretario técnico. Conozco mucho a su entrenador, sabe a lo que juega, compiten bien y van al límite. Se trata de un conjunto que practica un juego directo y que llega bien por banda, además ponen buenos centros, tienen 13 puntos de 15 y son líderes porque hace muy bien las cosas», resumió el preparador blanquiazul.