Ingo Volckmann, presidente del Atlético Baleares, ha enviado un mensaje de optimismo a la afición tras eliminación en Copa ante el Fuenlabrada (0-1), en el último partido de un año que se cierra con el equipo lejos por el momento de su objetivo, pelear por el ascenso a Segunda.

«Este año no estamos contentos. Ni yo ni el míster ni los jugadores», reconoce Volckmann en el vídeo publicado en sus redes sociales. «Pero la temporada es larga y todo es posible, creo que podemos llegar a mi objetivo», ha añadido el máximo accionista del Baleares, que ha asegurado: «Vamos a cambiar algunas cosas».

«No vamos a cambiar al míster», Declaró de inmediato Volckmann. «Me gusta el trabajo que hacen, aunque de momento los resultados no acompañan», explicó sobre Jordi Roger y su ayudante, Xavi Calm. «Son trabajadores, a mí me gusta la gente que lo da todo», insistió el germano, que hizo extensible el mensaje a la plantilla: «También con los jugadores. Si dan todo no puedo decir nada».

«Este año tampoco los árbitros han ayudado con algunas decisiones… Pero la culpa no es de los árbitros, es nuestra porque no ganamos partidos», sentenció Volckmann. «Vamos a hacer algunos cambios», repitió.

«Este año es muy raro, tampoco mis negocios están funcionando bien… pero lo importante es la salud», agregó el dueño del club, que de nuevo quiso ser optimista con respecto a lo que queda de temporada: «Vamos a luchar. Yo tengo muchas ganas, estoy muy animado. El objetivo es, por lo menos, la Segunda B Pro. La Segunda es un sueño. Y si no llegamos esta temporada, lucharemos la próxima».

«Vamos a cambiar muchas cosas», repitió de nuevo, y añadió: «El equipo ya ha cambiado el chip. Hemos hablado con ellos y la gente lo ha entendido. Tenemos diez partidos para llegar a nuestro objetivo», concluyó Volckmann, que deseó «Feliz Navidad y salud a todos» los aficionados del Atlético Baleares.