Los jugadores y miembros del cuerpo técnico del Atlético Baleares que dieron negativo en los tres test PCR a los que fueron sometidos han vuelto hoy al trabajo en el Estadio Balear después de diez días en cuarentena. Una mañana feliz para Jordi Roger, que ha dirigido una sesión reducida ya que hasta once miembros del primer equipo dieron positivo la pasada semana y se han visto obligados a quedarse en casa hasta que sean negativos. Según el club, todos están bien de salud y deseando regresar al césped, por lo que ya miran al futuro con optimismo.
El conjunto mallorquín se vio obligado a pedir el aplazamiento del duelo previsto para el pasado domingo ante el Castilla, tal y como marca el protocolo. Este finde semana no hay jornada en la Segunda B y el próximo encuentro previsto en el calendario para los blanquiazules es el del domingo 22 de noviembre, a las 12 horas, ante el San Sebastián de los Reyes en el feudo mallorquín. Está por ver con cuántos futbolistas dispondrá el preparador catalán, pero todo apunta a que, salvo contratiempo, el margen de tiempo para este duelo es suficiente para que sean todos, incluidos los que dieron positivo, a excepción de los lesionados.
