Un delicioso ejemplo de buñuelo salado en nuestra cocina, es el que nos presenta Esperança Bestard Mas (Sóller, 1947). Esperança, excelente cocinera doméstica, realizó el aprendizaje con su madre, de quien heredó el amor por la cocina tradicional; con sus enseñanzas y las de sus abuelas fue configurando su propio recetario. Este buñuelo, similar a una raola, es un ejemplo de cocina sencilla, económica, accesible y fácil.
Ingredientes:
Calabacín, huevo, leche, harina, aceite (para freír), sal, pimienta y albahaca. Opcionales en sustitución de la albahaca: ajo y perejil.
Preparación:
1. „ Lavaremos el calabacín (o los calabacines) y lo rallaremos en crudo, con la piel, haciendo unas virutas no excesivamente gruesas.
2. „ Una vez rallado, exprimiremos el calabacín para que pierda el máximo de agua..
3. „ Prepararemos una masa con las ralladuras, a las que agregaremos harina, huevo y leche, teniendo en cuenta que la pasta ha de resultar bastante espesa.
4. „ Cuando esté ligada le añadiremos albahaca bien picada, para que perfume los buñuelos, además de sal y pimienta.
5. „ Podemos optar por un aroma y sabor diferentes y sustituir la albahaca por ajo y perejil.
6. „ Con la ayuda de una cuchara iremos friendo en abundante aceite los buñuelos de calabacín, por ambos lados, hasta que se doren.
7. „ Una vez fritos los colocaremos sobre papel absorbente para que pierdan el exceso de grasa.
8. „ Los podremos servir como entrantes o bien acompañando un plato de carne asada.