Las rebajas de verano arrancarán mañana, 7 de julio, tanto en Mallorca como en Menorca con mayores descuentos que en anteriores campañas, ya que en esta ocasión se prevé que las reducciones en los precios superen el 30 por ciento, tal y como han anunciado los comerciantes, que han revelado asimismo un "inusual y alto grado de incertidumbre" de cara a este periodo de saldos.

El periodo de rebajas de este verano, que se prolongará durante dos meses, fue acordado el pasado 4 de junio por el Consejo Asesor de Comercio, órgano consultor que reúne a Govern, Consells, asociaciones empresariales, consumidores y sindicatos, quienes consensuaron establecer dos fechas de inicio de la campaña, es decir, el día 7 para Mallorca y Menorca y el 28 para Ibiza y Formentera, en respuesta a la petición de los comerciantes pitiusos.

Con el objetivo de hacer frente a las reducidas ventas registradas por el sector comercial en primavera, los establecimientos optarán por aplicar descuentos más elevados que, a diferencia de ediciones anteriores -en las que los primeros descuentos se situaban entre el 20 y el 30 por ciento-, superarán el 30 por ciento y alcanzarán en algunos casos el 50 por ciento.

Y es que los comerciantes mallorquines afrontarán las rebajas con un 56 por ciento de stock, cifra significativamente superior al 30 por ciento de nivel óptimo en términos de rentabilidad del sector una vez finalizado el periodo ordinario de ventas, según informó la patronal del Pequeño y Mediano Comercio de Mallorca (Pimeco).

En este sentido, el cien por cien de los establecimientos encuestados por la patronal mantienen almacenados bienes y productos de temporada y en disposición para vender muy superiores al 30 por ciento de nivel óptimo recomendado para afrontar la liquidación de los artículos de temporada en términos de facturación bruta y rentabilidad normal de negocio.

En concreto, los comercios de Palma presentan un 53 por ciento de estocaje y la 'part forana' un 59 por ciento, un 9 por ciento más en la capital balear que en la temporada anterior (en la que ya presentó cifras considerablemente elevadas) y un 12 por ciento más en el caso de los restantes municipios mallorquines.

"CLARO SÍNTOMA DE INCERTIDUMBRE"

No obstante, la percepción de los comerciantes encuestados ante la previsión del comportamiento del mercado en la próxima campaña de rebajas presentaba un "claro síntoma de incertidumbre" ya que por primera vez en los cuatro últimos años, un porcentaje "nada despreciable" y fundamentalmente en los pueblos de Mallorca manifiesta que no sabe cómo puede comportarse la campaña de rebajas. Dato que se contrapone al optimismo manifestado al inicio de anteriores ediciones.

Por su parte, desde la Federación de Empresarios de Comercio de Baleares (Afedeco), recordaron que en varias Comunidades Autónomas se han adelantado las rebajas, aunque advierten de que esta decisión "no es un capricho" sino que responde a que la situación actual "no es buena".

Mientras tanto, fuentes de las grandes superficies estiman que las rebajas de esta temporada van a ser "especialmente atractivas" debido a los "agresivos" descuentos que van a encontrar los clientes desde el primer día de venta especial, con precios reducidos al 50 por ciento en un amplio porcentaje de productos de moda. Además, el consumidor tendrá una oferta "muy variada" por la llegada tardía del verano, lo que ha provocado mayor acumulación de mercancía de la prevista, según puntualizaron.

Por último, el director general de Comercio del Govern, Pere Trias, aseveró que al cierre del mes de junio se ha constatado que el consumo se sitió al mismo nivel que en los seis primeros meses de 2007, con similar volumen de ventas. No obstante, puntualizó que no sucede lo mismo en el caso de la promoción inmobiliaria, que ha registrado una caída "significativa".

RECOMENDACIONES DE CONSUMO

De cara a estas rebajas, desde la Dirección General de Consumo recomiendan acudir a los comercios "con sensatez" y reflexionar para evitar la compra compulsiva. Asimismo, recordaron que el precio rebajado debe estar indicado claramente junto con el coste anterior; los productos deben estar correctamente etiquetados; el anuncio de ventas en rebajas debe afectar como mínimo a la mitad de los productos ofrecidos en el establecimiento, y los precios de venta deben figurar tanto en los aparadores como en el interior.

También, según el departamento dependiente de la Conselleria de Salud y Consumo, es conveniente solicitar información al comercio sobre si se aceptan cambios o devoluciones, y señaló que los artículos en rebajas no deben estar deteriorados; los medios de pago habituales -entre ellos las tarjetas de crédito- deben ser aceptados por el comerciante sin cargar un porcentaje superior por el uso de la tarjeta, y debe exigirse el ticket o factura para posibles reclamaciones.