A este respecto, el periodista Javier Pradera denunció hoy la "espiral de reivindicaciones competenciales" que se ha iniciado entre las distintas Comunidades Autónomas "en un afán por ser distintos, imposible de soportar", dijo Pradera.

"Deberíamos estar contentos con lo que se ha conseguido con las Comunidades Autónomas, que nos ha quitado un problema de reivindicaciones arqueológicas", señaló Pradera, columnista político del diario El País y director junto con Fernando Savater, de la revista ´Claves de Razón Práctica´.

UN MAPA ABIERTO EN LA CONSTITUCIÓN

En este sentido, Santos Julia señaló que la Constitución del 78 no "podía cerrar absolutamente el mapa de las autonomías" y deja en evidencia las contradicciones que existían en ese momento entre los distintos partidos políticos "En cuanto se ha roto el problema de construir un Estado se ha vuelto a enfatizar la carga ideológica que está detrás de cada una de las posiciones políticas".

Asimismo, apuntó que el problema de las reformas estatuarias comienza en 2004 cuando socialistas y nacionalistas empiezan a pactar reformas que no tiene cabida dentro de la Constitución. "La quiebra de un acuerdo sobre el Estado conduce a un auge de la confrontación en términos nacionales", indicó.

A este respecto, el periodista y escritor José Maria Ridao alegó que ha sido un "gravísimo error" dejar al Partido Popular fuera de los pactos sobre las reformas estatutarias iniciadas en los últimos años.

CAMBIO DE ESCENARIO

Frente a este debate, los autores del libro no plantean soluciones sino "dos modelos de cambio de escenario" porque los federalismos y la independencia "son imposibles de realizar", dijo Balfour. El primer modelo que proponen profundiza en la idea de evolucionar las competencias hasta el 100 por cien de las reclamaciones, mientras que la segunda opción consiste en crear un estado "plurinacional asimétrico, volviendo a la idea de la II República sobre las comunidades históricas".

"El pasado es con frecuencia el terreno en el que se reproducen las luchas del presente", señalan ambos autores en el prefacio de este libro, en el que también se señala una "crisis de identidad y gobernabilidad" en nuestro país, que debe ser considerada con "escepticismo".

"El punto muerto en el que se halla España en estos momentos encuentra paralelismos en muchos otros lugares del mundo; es síntoma de un proceso más amplio de globalización", argumentan.

TERGIVERSACIÓN DE LA HISTORIA

Por otra parte, los autores aseguran en este libro que el concepto que tienen de España los sectores conservadores está todavía, en muchos aspectos, "modelado con arreglo a la ideología tradicional, y ésta, por su parte, se basa en una tergiversación de la historia". "Este fenómeno de manipulación del pasado es común a todo nacionalismo, pero en el caso de la derecha española es, además, un indicador de su incapacidad para asumir la herencia del franquismo y en realidad forma parte de una estrategia consciente de negación".

"El nacionalismo español no ha logrado construir un nuevo imaginario democrático que pueda proporcionar un proyecto político común y un sentimiento de cultura compartida, porque los nacionalistas españoles de izquierda y de derecha han hecho gala de una actitud demasiado temerosa o simplemente cómplice con respecto al franquismo o han estado voluntaria y excesivamente absortos en su propio imaginario de modernización y europeización como para enfrentarse al pasado", concluyen.

Sebastian Balfour es catedrático emérito de Historia y Ciencia Política en la London School of Economics and Political Science y Co-Director del Cañada Blanch Centre for Contemporary Spanish Studies. Entre sus libros traducidos al castellano destacan ´La Dictadura, los trabajadores y la ciudad´, ´El fin del imperio español (1898-1923)´,´ Castro´ y, en Ediciones Península, ´Abrazo mortal´.

Y Alejandro Quiroga es profesor de Historia de España en la University of Newcastle. Sus trabajos de investigación se han centrado en el estudio del nacionalismo y el pensamiento conservador. Ha publicado ´Los orígenes del Nacionalcatolicismo´ y ´Haciendo españoles´.