"Sorpresa, diversión y entretenimiento" son los tres preceptos que marcan la programación de esta edición (del 14 al 16 de junio), que incluye 180 actuaciones (en vivo y sesiones de dj´s), y más de un centenar de instalaciones, exposiciones y conferencias.

Así lo ha informado en rueda de prensa Enric Palau, uno de los tres responsables de Advanced Music, promotora de un festival que, una vez más, demuestra su punto iconoclasta dando cabida a un estilo musical denostado por muchos, el reggaeton, dignificado de la mano de Calle 13.

La organización confía en alcanzar los 80.000 espectadores para todos sus escenarios, una cifra que se considera la apropiada para evitar que el festival se desarrolle sin exceso de aglomeraciones.

Las "sorpresas" serán muchas y desde el primer día, ya que los Beastie Boys ofrecerán una doble sesión inaugural: el jueves 14 de junio (Sonarpark), con un concierto instrumental, adelanto del álbum que sacarán a la calle el 25 de este mes, y el otro, el viernes 15 (Sónarclub), en su vertiente más estrictamente hip hop.

Los Devo, fundadores del pop sintético a mediados de los setenta, que no actuaban en Europa desde hace 17 años -y que nunca lo ha hecho en España-, se presentarán la noche del sábado 16 en uno de los conciertos que tiene todos los números para entrar en el libro de "grandes momentos" del Sónar, festival de tendencias, amante de rebuscar en los cajones del pasado.

Junto a nombres consagrados -Fangoria, Ángel Molina, Jeff Mills, Mogwai, Junior Boys, Miss Kittin, Dizzee Rascal o Cornelius (en el que será su debut en el certamen)-, también habrá sorpresas "chinas", ya que de la incipiente escena de música de baile de este país proceden algunos de los artistas que pasan este año por el Sónar, junto a otros "emergentes" de Finlandia, Puerto Rico, Dinamarca, Japón o Francia, por citar sólo algunos orígenes.

Bajo la "batuta" de Ricardo Villalobos, se presentará Narod Niki (día 14, Sonarpark), una formación especializada en el minimalismo de baile, formada por ocho músicos cuya identidad se desconoce, pero que en anteriores actuaciones ha tenido entre sus filas a Richie Hawtin. Y dentro del amplio programa también sobresale la actuación de Matthew Dears y el "stripstease" que protagonizarán los japoneses Romantica.

Otros artistas que pasarán por los escenarios diurnos y nocturnos del festival serán Mala Rodríguez (el sábado 16 junto a Raimundo Amador), Dave Clarke, Dixon o Timo Maas.

En la oferta expositiva destaca la muestra "Et voilà", una mezcla de "magia y tecnología", los once menús del SónarCinema, o la "experiencia" que se presenta el Sonarama (Santa Mónica), "un viaje a través del tiempo y del espacio" gracias a un montaje de imágenes, sonido, luz y humo, en el que se persigue la pérdida de la sensación espacial del espectador.

En definitiva, un cártel "poliédrico" que, a diferencia de otros años, no ha apostado en esta edición por homenajear un estilo de música concreto -el año pasado hizo un repaso de la música negra- y ha preferido abrirse a su vertiente más festiva: hacia el dubstep y el newrave, "las dos caras del baile actual".

La actividad del Sónar se reparte como es habitual en diversos espacios: los diurnos, en el Museo de Arte Contemporáneo y el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona, y los nocturnos, en el recinto de la Fira de Gran Vía, en L´Hospitalet de Llobregat.

El concejal de Cultura del ayuntamiento de Barcelona en funciones, Carles Martí, ha destacado la versatilidad de este certamen, que "cada año se reinventa y vuelve a sorprender", a la vez que continúa con su tarea extramusical de proyectar internacionalmente a la capital catalana.

Hasta hoy, se han acreditado más de 800 periodistas de 500 medios, la mitad de ellos españoles, aunque hay una importante representación del Reino Unido, Alemania, Italia y EE.UU.; además de 1.747 profesionales, de 627 compañías, que asisten a la feria del sector que también acoge el Sónar.