La chilena En la cama, del joven realizador Matías Bize, se alzó ayer con la Espiga de Oro a la mejor película de la 50 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci). El filme, protagonizado por Gonzalo Valenzuela -conocido en España por la telenovela Machos- y Blanca Lewin, muestra a una pareja pasando la noche en un motel.

A pesar de que acaban de conocerse, entre ambos se establece una química especial y en las horas que pasan juntos atraviesan todos los estadíos habituales en una pareja, desde la curiosidad inicial, pasando por la pasión, hasta los celos y la decepción. Bize, nacido en Santiago de Chile en 1979, consigue reflejar además los miedos, las ilusiones y las frustraciones de toda una generación.

El director de 26 años eligió en su segundo largometraje no salir nunca con la cámara de la habitación del motel y centrarse sólo en la relación entre los dos protagonistas. Los 85 minutos de la cinta, coproducida entre Chile y Alemania, se sostienen sobre todo en los diálogos escritos por Julio Rojas, que se alternan con escenas de sexo bastante explícito. En la cama, que pasó con notable éxito por los festivales de Locarno, Valdivia y Viña del Mar, se estrenará en Chile en noviembre.

El premio especial 50 aniversario de la Seminci, dotado con 50.000 euros, fue compartido por Manderlay, del danés Lars von Trier, y la coproducción entre Francia, Austria y Alemania Caché, de Michael Haneke. Krystyna Feldman fue elegida mejor actriz por la polaca Mi Nikifor, de Krzysztof Krauze, y Melvil Poupaud, mejor actor por Le temps qui reste, del francés Francois Ozon, película que recibió además la Espiga de Plata del jurado.

El galardón a la mejor fotografía fue concedido a Jie Du por la china Ping Pong Mongol, de Hao Ning, mientras que el Premio Pilar Miró a los jóvenes directores fue para el español Daniel Cebrián por Segundo asalto. En la sección Tiempo de Historia, centrada en el género documental, fueron elegidas como mejores películas Cuadernos de contabilidad de Manolo Millares, del español Juan Millares, y La dignidad de los nadies, del argentino Fernando Pino Solanas.

El Jurado de la Juventud, en tanto, distinguió a Agua, de la india Deepa Mehta, como el mejor filme de la sección oficial, mientras que la canadiense Sabah, de Ruba Nadda, fue premiada como la mejor de la sección Punto de Encuentro. En total, en este festival centrado en el cine de autor y el descubrimiento de nuevas cinematografías se vieron más de 210 películas.