Aunque confiesan ser reacios a recuperar proyectos ya realizados, los integrantes de la compañía Xesc Forteza tenían una cuenta pendiente con su maestro y, coincidiendo con el quinto aniversario de su muerte, han apostado por rescatar una de las obras del director mallorquín más aplaudidas, Catxin dena quin estiu, en homenaje a su figura.

Catalina Forteza, hija del desaparecido actor y director, destacó ayer en rueda de prensa que han elegido este montaje para rendir tributo a Xesc Forteza porque "es una de las piezas más famosas y de mayor éxito", junto a Majòrica. Una obra que se estrenó en 1997 en el hoy cerrado Teatre Principal, cuando su autor contaba 70 años, edad en la que conservaba "un espíritu joven", afirmó su hija.

"Fue la última que escribió, una obra moderna y actual, en la que se puede advertir toda la experiencia teatral que Xesc acumulaba", apuntó el actor Joan Bibiloni.

Del reparto de actores original repetirán, además de Bibiloni, que que ha tenido que cambiar de rol y encarnar el papel que interpretó en su día Xesc Forteza, Joan Bonet y Paquita Bover, quien ayer comentó que esta obra tiene un fondo de tragedia, pero, en su opinión, tal y como está escrita, se convierte en una comedia "divertidísima", con episodios "hilarantes", con un "humor sencillo y representativo de las islas".

A los veteranos actores se les han incorporado Núria Hosta y Catalina Campins, todos bajo las órdenes del director Paco León.

Catxin dena quin estiu, pieza con la que los actores y actrices de la compañía esperan "sorprender al público más joven", está inspirada en un caso real y cuenta la historia de una familia acomodada de Palma que ve cómo al trasladarse como cada año a su casa de veraneo el mundo se le viene abajo.

La obra estará durante un mes y medio en el escenario del Teatre Principal (del 16 de diciembre hasta el próximo 10 de enero) y supondrá el regreso, dos años después, de la compañía mallorquina a la programación navideña. En 2003, con el Principal cerrado por obras, el Municipal ocupado y el Teatro Xesc Forteza de sa Calatrava sin las condiciones adecuadas, el grupo escénico no consiguió un local en el que programar su obra, viéndose obligado a cortar la tradición de 35 años representando un espectáculo en navidades.

"Xesc Forteza es un referente en el teatro, dejó una marca y no podíamos perder esta tradición, la de representar obras suyas en navidades", declaró Paquita Bover.

Cerca de trescientas representaciones avalan a Catxin dena quin estiu, obra que no sólo consiguió el éxito entre el público, también de la crítica, que valoró su "humor sencillo y típico, aunque bien construido, incluso riguroso".

La Fundació Teatre Principal y el ayuntamiento de Palma han colaborado en esta reposición.