Cerca de 2.000 personas se manifestaron durante la inauguración de la XV Conferencia Internacional sobre el Sida, para denunciar la falta de acceso a los tratamientos médicos diseñados para luchar contra la enfermedad.

Los manifestantes, tailandeses y de otras nacionalidades, se concentraron frente al centro de convenciones situado a las afueras de Bangkok, en el que se dan cita alrededor de 15.000 personas relacionadas con las tareas de lucha contra la pandemia.

Provistos de pancartas que acusaban al Grupo de los Ocho (G-8) y al presidente de EEEU, George W. Bush, de mentir a la comunidad internacional, los manifestantes exigieron a los países desarrollados que aporten los fondos que se comprometieron a desembolsar en el pasado para combatir el sida.

"¿Dónde están los 10.000 millones?" gritaban los manifestantes. En un comunicado, los activistas indicaron que "el mundo no va a aceptar que se rompan más promesas o (que existan) barreras políticas que impidan el acceso de los afectados por el sida a los programas de prevención.