La etóloga británica Jane Goodall, premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica 2003, defendió ante los líderes religiosos reunidos en el Fórum la necesidad de adoptar políticas de planificación familiar para controlar el crecimiento de la población.

Goodall, que ha dedicado 45 años de su vida al estudio y defensa de los chimpancés, ha visitado el Parlamento de las Religiones del Mundo que se celebra en el Fórum con el objetivo de concienciar a las personas de distintos credos sobre la necesidad de tomar medidas urgentes para frenar el deterioro medioambiental.

"No habrá paz mundial si no aprendemos a vivir en armonía con el medio ambiente", ha alertado la etóloga. "En el mundo hay más personas de las que puede soportar (...) No se trata sólo de control de natalidad, sino de romper la curva de crecimiento de la población en los países en desarrollo", ha dicho Goodall.

"Sé que es un tema muy difícil, que no hay mucha ceguera y que no es fácil transmitir información, pero hay que aplicar algún tipo de programas", ha agregado.

La etóloga, que en 1977 fundó el Instituto Jane Goodall para la protección de las poblaciones de chimpancés, ha comentado que también es imprescindible realizar acciones para cambiar el estilo de vida imperante en el planeta, basado en criterios materialistas.