La semana pasada, el New York Times publicaba que un grupo de hackers rusos había robado más de 1.200 millones de contraseñas y 500 millones de direcciones de email. Entre las empresas afectadas se encuentran grandes multinacionales del sector tecnológico como pequeñas empresas de todos los sectores.

Para llevarlo a cabo los ladrones compraron las direcciones de email en el mercado negro, y luego las bombardearon con spam para obtener las claves. La imprudencia de los usuarios hizo el resto.

Los expertos lo consideran como "el mayor robo de contraseñas descubierto hasta la fecha". Pero no es el único. En las últimas semanas, se han denunciado otros agujeros de seguridad en algunas de las principales redes sociales: Instagram, Badoo, Whatsapp€ En muchos casos, la empresa que proporciona el servicio no es consciente de ello, y sus clientes tampoco.

Es necesario seguir una serie de recomendaciones para mantener al mínimo el impacto de los hackers, centrados en el uso del elemento principal de protección: las contraseñas.

Lo mejor es asumir la realidad de los hechos y ser conscientes de que la brecha de seguridad es grande, y en todo momento están ocurriendo ataques similares, más reducidos. Lo más recomendable es mejorar la seguridad online de inmediato, de manera preventiva.

Hay que tener especial cuidado con aquellos sitios web que contienen información sensible, como financiera, de salud o de tarjetas de crédito. No se debe utilizar la misma contraseña en diferentes sitios web.

Para crear claves más seguras se puede probar a utilizar un gestor de contraseñas como LastPass o Password Safe. Son pequeños programas que contribuyen de forma decisiva a mantener la seguridad, ya que crean una clave para cada sitio web visitado y las almacenan en una base de datos protegida por una contraseña principal creada por el usuario.

Si no se quiere utilizar un programa de este tipo, y se desea crear contraseñas propias, no se debe utilizar como base palabras que se encuentren en el diccionario. Algunos expertos sugieren utilizar iniciales de frases, y símbolos y números para hacerlo más complicado. (Por ejemplo, con la frase "Una Vez en Clase comí Pegamento", podría quedar: 1veCcP).

Casi todos los sitios web de banca ofrecen prestaciones adicionales de seguridad de las que conviene hacer uso (autenticación secundaria, autenticación doble€). Chequear regularmente los registros bancarios puede ayudar a minimizar los daños si alguien logra acceder a la información privada. Sólo las empresas que almacenan los datos personales son responsables de hacerlos seguros, los usuarios tiene la capacidad de reducir las posibilidades de los hackers y ladrones de identidad.