La mayoría de las personas que se someten a cirugías, se someten a intervenciones ambulatorias que, por norma general, no tienen complicaciones. No obstante, el paciente se enfrenta a una situación de estrés al ver que va a ser intervenido con una sedación que le va a mantener consciente lo que implica tener conciencia de la intervención.

Estar consciente durante una operación puede hacer que los pacientes se sientan ansiosos y es, a menudo, doloroso. Sin embargo, una nueva investigación de la Universidad de Surrey, en Reino Unido, ha visto que simples técnicas de distracción, como hablar con una enfermera, ver un DVD o el uso de pelotas contra el estrés, pueden ayudar a las personas a relajarse durante la cirugía de varices y reducir el dolor.

Esta investigación, publicada en la revista 'European Journal of Pain', analizó a 398 pacientes, dividiéndolos en cuatro grupos: al primero se le puso música durante la operación; al segundo se le ofreció una selección de DVD para ver en una televisión en la pared; al tercero una enfermera le dio conversación durante todo el procedimiento y al cuarto se le proporcionaron dos bolas antiestrés del tamaño de la palma y se le explicó cómo usarlas si se sentía ansioso o si preveía o experimentaba sensaciones incómodas.

Los niveles de ansiedad y de dolor se midieron a través de un breve cuestionario rellenado inmediatamente después de la operación. Los resultados mostraron que el grupo que vio un DVD mostró un 25 por ciento menos de ansiedad que el que recibió el tratamiento habitual, aunque no hubo diferencias para el dolor. El grupo que interactuó con una enfermera presentó un 30 por ciento menos de ansiedad y un 16 por ciento menos de dolor que los que recibieron el tratamiento habitual.

Los individuos del grupo que utilizó bolas contra el estrés tuvieron un 18 por ciento menos ansiedad y un 22 por ciento menos de dolor que los que recibieron el tratamiento habitual. Sin embargo, la música no tuvo ningún efecto sobre la ansiedad o el dolor de los pacientes que están conscientes durante una operación quirúrgica, según este estudio que examinó el efecto de simples técnicas de distracción en pacientes sometidos a cirugía de varices.

El equipo de investigadores se centró en este tipo de cirugía porque normalmente se hace con el paciente despierto, usando anestesia local, además de que, durante esta operación, las personas han experimentado previamente sensación de ardor y han detectado olores desconocidos, sonidos y sentimientos. Como están despiertos, también escuchan conversaciones entre el cirujano y la enfermera con detalles inquietantes acerca de la cirugía.

Procedimiento es altamente efectivo y seguro

Aunque el procedimiento es altamente efectivo y seguro, los pacientes a menudo experimentan ansiedad, ya que son plenamente conscientes de todo lo que está sucediendo. "Someterse a una cirugía consciente puede ser una experiencia estresante para los pacientes -señala la autora del estudio, la profesora Jane Ogden, de la Universidad de Surrey-. Es muy importante encontrar maneras de hacer que se sientan más cómodos. El uso de técnicas de distracción simples puede mejorar significativamente su experiencia".

"Nuestra investigación ha encontrado una manera simple y económica de mejorar las experiencias de este procedimiento común y desagradable de los pacientes, y podría ser utilizado para una amplia gama de otras operaciones realizadas sin anestesia general. Esto también podría incluir el gran número de procedimientos exploratorios, como colonoscopias e histeroscopias, que se hacen mientras los pacientes están conscientes".