La ingesta de una porción al día de alubias, guisantes, garbanzos o lentejas puede reducir significativamente el colesterol 'malo' y, por tanto, el riesgo de enfermedad cardiovascular, según concluye un nuevo estudio, dirigido por el doctor John Sievenpiper, del Centro de Nutrición Clínica y Modificación de Factores de Riesgo del Hospital St. Michael, en Canadá, y publicado este lunes en 'Canadian Medical Association Journal'.

Sievenpiper explica que al comer una porción al día de legumbres, la gente podría reducir en un 5% su colesterol LDL ("colesterol malo") y que esto se traduciría en una disminunición de entre un 5 y un 6% del riesgo de enfermedad cardiovascular, la principal causa de muerte en Estados Unidos.

Una porción de legumbres es unos 130 gramos o tres cuartos de taza, pero los norteamericanos comen una media de menos de la mitad de una porción al día. Las legumbres poseen un índice glucémico bajo, lo que significa que son alimentos que se descomponen lentamente, y tienden a reducir o desplazar a las proteínas animales, además de a las grasas "malas" como las grasas trans, en un plato o una comida.

"Tenemos un montón de espacio en nuestra dieta para aumentar la ingesta de legumbres con el fin de obtener beneficios cardiovasculares", señala Sievenpiper. "Las legumbres ya desempeñan un papel importante en muchas cocinas tradicionales, incluyendo la del Mediterráneo y del sur de Asia. Además, son de bajo costo. Dado que muchas legumbres se cultivan en América del Norte, es también una oportunidad comprarlas en la zona y apoyar a los agricultores", añade.

El metaanálisis del doctor Sievenpiper revisó 26 ensayos controlados aleatorios que incluyeron a 1.037 personas. Los hombres registraron una mayor reducción en el colesterol LDL en comparación con las mujeres, tal vez porque sus dietas son más pobres y sus niveles de colesterol, más altos, de forma que se benefician más marcadamente de una dieta más saludable. Algunos de los participantes del estudio informaron de malestar estomacal, como hinchazón, gases, diarrea o estreñimiento, pero estos síntomas se calmaron en el transcurso del estudio.