Con mucha frecuencia me encuentro pacientes en la consulta que acuden con problemas lumbares y esa es su pregunta. Es muy común en el ámbito deportivo y a nivel de entrenamiento personal inducir a los clientes con problemas de dolor lumbar a realizar infinidad de abdominales con la finalidad de evitar el problema lumbar.

A la pregunta ¿Es bueno hacer abdominales en estas personas? La respuesta seria "no" cuando el dolor está presente o hay un fenómeno inflamatorio implícito. Sabemos que la musculatura abdominal es importante que esté en buenas condiciones, pero hacer abdominales no es la solución a un problema mecánico que está provocando dolor lumbar o dolor irradiado a la zona de la nalga y/o incluso el muslo.

Por norma general, si tengo dolor lumbar es muy probable que tenga un origen mecánico y sea consecuencia de un desplazamiento del disco intervertebral a posterior. Este desplazamiento posterior del disco puede estar comprimiendo el nervio y provocar la conocida ciatalgia (ciática) y/o dolor localizado en la zona lumbar.

Dicho desplazamiento se produce en los movimientos de flexión que realizamos con mucha frecuencia en nuestras actividades cotidianas: cuando estamos sentados en la oficina estamos en flexión, en el sofá de casa estamos en flexión, en el coche estamos en flexión, haciendo spinning estamos en flexión y, además, si vamos al gimnasio nos sentamos en las maquinas haciendo ejercicios sentados y para terminar como me duele la espalda hago interminables series de abdominales en Pilates y con mi entrenador personal porque dicen que tengo que tener las abdominales fuertes, así que sigo haciendo más flexiones.

Curiosamente la flexión lumbar está haciendo que se provoquen mis síntomas y sabemos que no debemos flexionar la columna si nos duele la espalda. Si es así ¿por qué intentamos solucionar el problema haciendo mas flexión si, como hemos explicado, este desplazamiento continúo del disco a posterior es el que hace que se perpetúen los síntomas?

Desde mi experiencia pienso que es imprescindible valorar a cada paciente de forma individual para determinar su capacidad de movimiento en relación al dolor que tiene y asegurarse de haber recuperado la movilidad del segmento lumbar antes de la introducción de ejercicios para potenciar la musculatura del segmento afectado, con la finalidad de tener una columna con mayor tolerancia al esfuerzo y al estrés. No hay una receta global para ejercicios que quiten el dolor de espalda pero si existen ejercicios individuales que ayuden a quitar ese dolor.

Antes de hacer cualquier ejercicio en personas con dolor lumbar debemos asegurarnos que la movilidad del segmento lumbar es libre e indolora. Esta sencilla regla nos permitirá valorar si podemos empezar a hacer abdominales u otro tipo de ejercicios más adecuados con el estado de cada uno.