La prevención en la salud es esencial. El día a día, el estrés que se acumula en el cuerpo, ocasionan que los dolores vayan a más y el papel de los fisioterapeutas es importante para llevar a cabo el mejor tratamiento.

A lo largo de nuestra profesión observamos cómo van evolucionando todas las patologías a medida que va cambiando la sociedad y a su vez las técnicas propias de la fisioterapia. Por ese motivo, los fisioterapeutas estamos en continúa formación, al ritmo que avanzan las técnicas, con el objetivo de prevenir, curar y recuperar a nuestros pacientes de las patologías, de la manera más eficaz posible.

La prevención es esencial. El día a día, el estrés que acumulamos, los distintos hábitos, etcétera, nos llevan a sufrir cada vez más dolores. Lesiones que con frecuencia podemos evitar con un buen programa de prevención.

La posibilidad de evitar una lesión pasa por una buena educación en higiene postural, una adecuada adaptación del entorno, un buen estado musculo- esquelético y psicosocial y el tratamiento directo de la causa.

A menudo exigimos a nuestro cuerpo un rendimiento para el que no está preparado. Desde la fisioterapia la musculatura se tonifica y flexibiliza para enfrentarse a determinados esfuerzos, las articulaciones se preparan para conseguir estabilidad, equilibrio y propiocepción, el sistema vascular se drena para mejorar su circulación, el sistema cardiorespiratorio se entrena para aumentar su capacidad?

Entrenamiento diario

No sólo debemos acordarnos de la fisioterapia cuando aparece el dolor. Los fisioterapeutas no nos ceñimos únicamente al tratamiento de dolencias musculares, enseñamos al paciente a adaptar el entorno según sus necesidades y preparamos su estado físico general para enfrentarse al día a día.

Si la patología ya está instaurada, es decir ya hemos sufrido la lesión, la fisioterapia cuenta con un amplio abanico de técnicas para su tratamiento.

Cualquier especialidad médica es susceptible de tratamiento fisioterápico; traumatología, cardiología, neurología, pediatría, reumatología, ginecología, obstetricia, geriatría, urología, etcétera.

Uno de los objetivos principales para los que trabajamos en el campo de la fisioterapia, es conseguir la máxima calidad de vida para nuestros pacientes.

En mi opinión, para obtener un resultado exitoso es necesario ponerse en manos de profesionales titulados y avalados por su experiencia, un buen equipo terapéutico para conseguir una buena valoración y una pauta adecuada de tratamiento.