Los Gran Turismo (GT) han vuelto con fuerza al escalón más selecto de la industria del automóvil. Las grandes berlinas de lujo de corte deportivo que marcaron época a mediados del siglo pasado, han servido de inspiración para toda una nueva generación de modelos en la que los desarrollados por BMW han adquirido un especial protagonismo. Éste es el caso del nuevo BMW Serie 6 Gran Turismo. Fiel a su renovada política de posicionamiento de gama, la firma alemana ha trasladado a la Serie 6 el concepto GT.

De esta manera, esta propuesta que combina deportividad y polivalencia interior a partes iguales, pasa de ser parte de la gama de berlinas de la Serie 5, para situarse en un escalón superior como es el ocupado por la Serie 6, cuyo número par se identifica con los coupés y vehículos especiales de BMW.

Y eso es precisamente el 6 GT; una especial interpretación del dinamismo innato y el lujoso confort del que es capaz de ofrecer el constructor alemán. Sobre la carrocería de inconfundible silueta coupé de cuatro puertas del Serie 6, este GT aporta un extra de versatilidad al contar con unas agrandadas proporciones posteriores, y unas dimensiones más largas -5,10 metros de longitud- y más bajas -1,54 metros de altura- que su antecesor.

Espacio y lujo interior

Y todo ello acompañado de un más confortable interior en el que destacan detalles como la posición más elevada de los asientos, la ergonómica orientación del puesto de mando hacia el conductor, la disponibilidad de tres cómodos asientos posteriores con respaldo regulable eléctricamente opcional y una excepcional volumen de maletero con 610 litros (110 más que el 5 GT) que puede alcanzar los 1.800 litros si se abaten los asientos en su totalidad. En materia tecnológica, el 6 GT cuenta con un nuevo dispositivo de info-entretenimiento con un pantalla táctil de 10,25 pulgadas, con un avanzado control por voz y, de manera opcional, un sistema de accionamiento capaz de reconocer gestos con las manos.

La gama inicial dispone de dos alternativas de gasolina y otras dos diésel. Las primeras son las versiones 630i y 640i de 190 y 150 cv de potencia respectivamente. En diésel dispone de los 630d de 265 cv y 640d de 320 cv. En todos los casos se recurre a una caja automática de velocidades, mientras que la tracción a las cuatro ruedas xDrive va asociada de serie al motor del 640d, y también se puede equipar en los 630d y 640i.