Seat ha dado un nuevo paso en su estrategia todoterreno. La presentación del Arona supone la confirmación de la decidida apuesta que la firma española ha hecho por un mercado en continuo crecimiento. Justo un año después del inicio de la comercialización del exitoso Ateca, y a la espera de la llegada de un SUV grande de 5 ó 7 plazas, Seat presenta sus credenciales en el segmento B de los crossover compactos, un mercado que se ha multiplicado por cuatro desde 2015.
Con 4,14 metros de longitud, el Arona se encuadra dentro de la gama SUV como el hermano pequeño de la familia. Unas dimensiones que superan en 79 mm de largo y 99 m de alto al Ibiza, con el que comparte la nueva plataforma MQB A0 del Grupo Volkswagen, la misma que se utiliza en el nuevo Polo.
Asimismo, la suspensión eleva la carrocería en 15 mm respecto al Ibiza, con lo que el Arona ofrece una mayor altura libre al suelo para poder circular fuera del asfalto. Asimismo se mejora el espacio para la cabeza tanto en las plazas delanteras como en las traseras y, sobre todo, la capacidad inicial del maletero con un total de 400 litros de volumen, ampliables a 1.280 litros si se abate el asiento posterior.
Imagen de marca
El interior sigue las tendencias que han caracterizado a las últimas generaciones tanto en materia de diseño como de conectividad. De esta manera, destacan detalles como el concepto de «Consola Elevada» en el que todos los elementos están ubicados a una altura y ligeramente orientados hacia el conductor, de manera que apenas se tenga que desviar la vista de la carretera mientras se conduce. En materia de conectividad el principal protagonista es el sistema Full Link que vincula el smartphone con el vehículo mediante Apple Car Play, Android Auto y Mirror Link.
Al igual que en el resto de la gama Seat, la gama Arona se estructura en torno a los niveles de acabado Reference, Style, Xcellence y FR. Una serie de terminaciones que se pueden combinar con una amplia gama de motores gasolina TSI, diésel TDI y de Gas Natural Comprimido (GNC).
Entre los primeros se encuentra el 1.0 de tres cilindros en niveles de potencia de 95 y 115 cv, éste último disponible también con en cambio DSG de doble embrague y 7 velocidades. En lo más alto de la gama gasolina se posiciones el 1.5 de 150 cv con tecnología de desconexión de cilindros, sólo disponible en el acabado FR y con cambio manual.
En diésel, en un principio se cuenta con el 1.6 TDI en versiones de 95 cv -manual y automático- y 115 cv. como puerta de acceso a la gama. Por último, Seat ha anunciado para mediados de 2018 la llegada de una variante híbrida con el motor 1.0 TSI de 90 cv alimentado por gas natural comprimido (GNC) y gasolina.
