Renault tiene en el Clio a uno de sus principales pilares de su gama de turismos. Un modelo el utilitario compacto francés, que se ha consolidado como uno de los grandes protagonistas del mercado europeo. Por todo ello, la firm afrancesa ha decidido reforzar esa posición de privilegio con una más que acertada puesta al día. En la parte delantera destacan los faros LED «Pure Vision» que cumplen la función de luces de cruce y de luces de carretera.

Esta tecnología mejora tanto la estética como la seguridad gracias a una luz un 20 % más potente que un haz halógeno y menos deslumbrante. En las versiones superiores, las ópticas del Clio incorporan igualmente las luces de día (DRL) de LED en forma de «C», características de la nueva firma luminosa de la gama. En la parte trasera, el diseño del paragolpes también ha sido rediseñado para dar mayor sensación de robustez.

Habitáculo renovado

En el interior, el nuevo Clio se beneficia de la utilización de materiales que provienen de vehículos del alto de gama de la firma del rombo. El conjunto de las tapicerías ha sido renovado y se ha prestado especial atención a la calidad percibida y al tacto de los plásticos.

Asimismo, los cromados son más finos y en tono mate, y los colores son más sobrios. Además, la pantalla multimedia táctil de 7 pulgadas también ha sido mejorada con nuevas funciones en materia de conectividad y funciones.

En materia de confort, destacan detalles como los retrovisores abatibles de forma automática al cerrar las puertas, los espejos de cortesía con luz, o el retrovisor electrocromado que evita el deslumbramiento de noche. En la misma línea de equipamiento interior, cabe citar el equipo de música desarrollado por Bosé con 7 altavoces y una excelente calidad de sonido.

En los ambientes urbanos se agradecen los nuevos sensores dispuestos alrededor del vehículo que lo hacen especialmente manejable y práctico, incluso en las situaciones de conducción y de aparcamiento más delicadas. Además del radar de marcha atrás, se puede montar -según las versiones- radar delantero y cámara de marcha atrás.

La unidad que tuvimos la ocasión de probar iba equipada con el motor 1.5 dCi de 90 cv, la alternativa intermedia de la gama diésel del Clio. Un propulsor idóneo para todo tipo de necesidades dado su excelente rendimiento y su ajustado consumo. Disponible con cambio automático de 5 velocidades o con uno automático de doble embrague EDC, esta versión dCi se presenta como una de las más equilibradas de la gama Clio.