El Mobile World Congress es uno de los más importantes eventos del mundo tecnológico, y a tenor de lo que se ha podido ver este año, va camino de convertirse también en un referente dentro del mundo de la automoción. 2017 ha sido el año en el que el sector automotriz ha estado presente en la práctica totalidad de los grandes expositores tecnológicos. Desde grandes operadores internacionales como Telefónica, Vodafone, Orange o SK Telecom hasta gigantes tecnológicos como Intel, Huawei, Samsung o Qualcomm, todos tenían alguna demostración de hacia dónde camina la industria del motor. Y es que, siendo honestos, la inminente llegada del 5G va a cambiar muchos aspectos de nuestras vidas. Y el de la movilidad será uno de ellos.

En lo que a marcas de automoción se refiere, fueron muchas las que estuvieron presentes en el congreso de este año. BMW mostró los primeros resultados de su alianza con Intel a través de una demostración en la que un coche se aparcaba sin conductor obedeciendo las órdenes dadas por su propietario a través de gestos con el brazo. Otro gigante alemán, Mercedes-Benz, mostró su nuevo Clase E Coupé y cómo gracias a su tecnología Comand Online el vehículo es capaz no solo de obtener la información del tráfico en tiempo real, sino de comunicarse también con otros coches con los que se cruza, creando así rutas dinámicas que evitan atascos, obras y accidentes.

La española Seat mostró un nuevo concepto de coche urbano pensado para la movilidad compartida. El propio presidente de la compañía, Luca de Meo, anunció en rueda de prensa que "la conectividad del futuro estará en nuestros coches a partir del año que viene" en una clara referencia a lo que allí mostró la compañía.

Peugeot también estuvo presente con su propio estand, en el que mostró en primicia mundial su nuevo concept car, el Instinct Concept, un coche elécrico cuyo desarrollo en colaboración con Samsung alcanza cotas de movilidad autónoma insospechadas.

Por su parte, Ford, uno de los primeros fabricantes en apostar por el evento de móviles de Barcelona -la de este año era su sexta presencia consecutiva-, mostró varios prototipos sobre movilidad realmente sorprendentes.