La incorporación del número 718 a la gama de biplazas con motor central de Porsche hereda la más exitosa herencia de competición de la firma de Stuttgart. Una referencia a los innovadores deportivos de 1957 que obtuvieron grandes éxitos en competición en todos los escenarios durante las décadas de los años 50 y 60 del pasado siglo. Si bien fue la magnífica versión descapotable 718 Boxster la primera en llegar al mercado, ahora le ha tocado el turno a la configuración coupé 718 Cayman.

La gama 718 es una continuación del experimentado concepto de cuatro cilindros y de la historia de los reconocidos deportivos de la firma alemana. El 718 Cayman viene equipado con un motor bóxer sobrealimentado de cuatro cilindros y dos litros, con una potencia 300 cv, mientras que la versión S aumenta su cilindrada a 2,5 litros y su potencia a 350 cv. En ambos casos supone una ganancia de 25 cv respecto a sus antecesores. Tal despliegue de potencia supone un brillante cuadro de prestaciones para los dos modelos; el 718 Cayman con PDK y paquete Sport Chrono acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y el 718 Cayman S, en 4,2 segundos -0,5 s menos-. La velocidad máxima es de 275 km/h y 285 km/h respectivamente. Como novedad cabe mencionar el modo Sport del PSM, con límites más amplios para conductores deportivos especialmente dinámicos. Asimismo, y gracias a la sobrealimentación y a la reducción de la cilindrada, Porsche anuncia unos consumos para las versiones equipadas con el cambio PDK de 6,9 litros para el 718 Cayman y de 7,3 para el 718 Cayman S.

En materia estética, el 718 Cayman mantiene prácticamente intactos los rasgos de su hermano cabrio. Una imagen claramente inspirada en el 911, sobre todo en la parte trasera, con la característica caída del volumen posterior del Porsche por excelencia. También incorpora detalles como las agrandadas entradas de aire frontales o el emblema tridimensional en la zaga o los nuevos grupos ópticos delanteros y los traseros. Además, con este cambio de generación, el coupé se ofrece por primera vez a un precio más bajo que el roadster, como sucede con los 911.