Elegido como uno de los mejores superyates del mundo en los prestigiosos ­­­­­­­­World Superyacht Awards, esta maravilla de 53 metros de eslora tiene una importante relación con Balears ya que fue restaurado en las instalaciones del palmesano varadero de STP, uno de los más avanzados que hay a día de hoy en Europa.

Tras una pequeña restauración en 2007, el Mirage no lucía como antaño, por lo que su nuevo propietario decidió, tras adquirirlo, que debía hacer una reconversión en profundidad. A lo largo de tres largos inviernos, que permitieron a su dueño usarlo en verano, el Mirage fue totalmente transformado hasta el punto de que el propio dueño afirmó que se habían superado todas sus expectativas.