Buscar el vestido nupcial ideal ya es una tarea un tanto ardua. Si a esto le sumamos que los accesorios para el vestido de novia tienen que combinar con todo el conjunto, y siempre teniendo en cuenta los gustos de la mujer y sus rasgos físicos y faciales, el asunto se complica más. Entre los accesorios más destacados y tradicionales para complementar el atuendo está el velo de novia, que aunque son un símbolo religioso y de pureza, hoy en día sus diseños se han renovado adaptándose a los nuevos tiempos.

A continuación, te desvelamos las tendencias de velos de novia para este 2015, para que te sirva de guía a la hora de comprar este bello accesorio romántico.

Los modelos que se llevan van desde los más sencillos hasta los más modernos, e incluso con incrustaciones de bordados de pedrería, en aquellos diseños de velos más lujosos. Pero debes saber que si decides apostar por los velos de novia con detalles de este tipo, es importante que tengas en cuenta si tu vestido de novia ya tiene incrustaciones y bordados, ya que todo el conjunto debe quedar en armonía y equilibrio.

En cuanto a los diseños que más se llevan, están los velos lisos con borde trabajado que caen en forma de cascada por la espalda, ligeramente más debajo de la cintura. Los bordes suelen estar rematados con pequeñas blondas de encaje. Otro tipo de velo similar al anterior pero un poco más largos son los velos ballet. Estos velos llegan hasta un punto intermedio entre la rodilla y el tobillo, esto es, no llegan a tocar el suelo y tampoco se arrastran como una cola.

Fuente: Pronovias

Otro tipo de velo es el del estilo catedral se trata de uno de los velos más tradicionales y dramáticos por su extensión más allá de los pies de la novia y se arrastra detrás como una cola. No hay una longitud determinada, puede ser más largo que la cola del vestido o no. Esto dependerá al gusto de la novia.

Fuente: Pronovias

Respecto a los velos más trabajados y en los que predominan los detalles, se encuentran aquellos velos muy largos que pueden ir cerrados bajo la barbilla y cubren todo el vestido, destacando así la pedrería y los brillos propios del velo.

Si buscas un estilo vintage el velo jaula es el ideal para ti. Se trata de una redecilla que cubre la cara y que, por lo general, termina justo encima de la barbilla, aunque también está el que solo cubre los ojos. Al ser un velo muy corto es muy cómodo de mantener. Si es asimétrico, es decir, con caída a un lado te dotará de un aire elegante al dejar descubierto solo un ojo. Siguiendo en el mismo estilo, también predominan las diademas tipo tocados que incorporan la redecilla de estilo retro, y con flores naturales. El velo estará fijado por broches, tiaras de cristal o coronitas con pedrería.

Fuente: Enchanted Ateliér by Liv Hart

Asimismo, son tendencia los velos que reposan suavemente sobre el cabello, caen a media altura sobre el rostro de la novia, con un largo asimétrico, más corto por la zona delantera que trasera.

Para las más atrevidas tenemos los sombreros con velo incorporado que dan un toque chic y sofisticado a la novia. Pueden tener diversos elementos como lazos, velo de tul, etcétera.

Los tejidos más empleados en esta especie de mantilla y los que serán los principales protagonistas de los próximos meses son los encajes, los satenes, la seda y el tul. Se estructura en un mínimo de dos capas para darle volumen al velo.

En resumen, en esta temporada predominan los velos de novia de longitud mínima o incluso excesivamente cortas, los velos que caen justo por encima del busto, los tradicionales velos con colas, y sobre todo, los que incluyen detalles.