La "influencer" española más internacional, Gala González, que cumple una década en la comunicación de moda, publica su primer libro "#Galaconfidential, un repaso de su vida, "tanto profesional como personal", en el que reconoce que los años "ayudan" a sentirse "más segura".

Hace diez años casi nadie imaginaba el potencial de las redes sociales, solo algunos supieron ver el atractivo y el potencial de la comunicación a través de Internet, como Gala González, una de las primeras blogueras españolas, que hoy acumula más de 900.000 seguidores en Instagram.

Con toda una carrera labrada a base de "post", esta gallega que vive "un tercio del año" entre aviones, aunque está afincada en Nueva York, afirma, en una entrevista con Efe, que su balance es "positivo".

"Fuimos unos pocos los que empezamos con casi todo en nuestra contra, abriendo camino con esfuerzo y tesón para las generaciones posteriores", señala en relación a la popularización que ha alcanzado su profesión.

Adulada por los jóvenes y aún hoy incomprendida por muchos padres, a sus 32 años le gustaría que el libro fuese una "guía" para todo aquel que quiera aventurarse en la industria de la moda y la comunicación "online".

Gala González es consciente de que para el público adolescente se ha convertido "en su modelo a seguir". Por eso, #GALACONFIDENTIAL (Grijalbo) lo ha planteado como una suerte de guía práctica para aspirantes a "influencer".

"Quería que su lectura actuase como punto de partida para cualquier persona que quiera dedicarse al entorno digital", afirma la autora, formada en las aulas de la prestigiosa escuela londinense Central Saint Martins, mientras elaboraba campañas para la línea joven de Adolfo Domínguez, su tío.

Preguntada por su figura como una de las primeras representantes "online" de la Marca España fuera del país, González afirma que siempre se ha sentido "muy orgullosa de ser española y de poder representar a mi país a través de mi trabajo". Y añade, "siempre he sido consciente de la responsabilidad enorme que entraña".

Pero su primera aventura en el mundo de la literatura aborda también relatos íntimos de su infancia en A Coruña, de su juventud entre Londres y Barcelona,y de sus primeros pasos como adulta por Nueva York -siempre acompañada de sus seguidores cibernéticos- a lo largo de un texto de 214 páginas y algunas fotografías.

Nada que ver con la extensión de sus píldoras de moda en Amlul.com, su blog personal, que le abrió las puertas a la moda internacional.

En la vida de esta "influencer" no todo son colaboraciones con marcas de renombre, viajes y fiestas privadas, algo que la experta en moda ha querido dejar muy claro en sus páginas, donde cuenta que se sentía "como el patito feo" en sus primeros trabajos como modelo.

"He aprendido a aceptarme. Todas sentimos inseguridades, sobre todo en una cierta edad y es vital quererte por dentro y por fuera", señala la gallega, que acaba de llegar a Madrid procedente de Ibiza, donde ha trabajado en una campaña para la firma española Loewe.

Conocedora de las marcas españolas más populares a nivel internacional, no duda en citar a la propia Loewe y a Delpozo como dos casas que exportan la Marca España. La moda "low cost" también juega un papel importante gracias al "imperio Inditex, que es un referente mundial", y a "el buen hacer" de Mango.

Tras diez años en la cresta de la ola, la popularización de su profesión plantea nuevos retos para González, quien se plantea "seguir trabajando duro" y no perder de vista su "mantra": "Apostar siempre por la calidad antes que la cantidad".

Esa es la clave, no solo de su trabajo sino también de una de sus satisfacciones: pensar que la "Galita", como le llaman cariñosamente sus padres y amigos íntimos, que se crió en Galicia, "se sentiría orgullosa" si conociera a la Gala adulta.