La mejor biografía del nuevo vicepresidente del Govern está en los vídeos de sí mismo que ha colgado en youtube. Con un perfil exhibicionista que contrasta con su aura profesoral, Josep Ignasi Aguiló recita el monólogo "un profesor ha de emplear palabras salvajes, pues éstas son el asalto de los pensamientos a lo impensado". Y pronuncia sus queridas "palabras salvajes" –véase nuestra ilustración– con el énfasis de un asesino en serie o de un recortador del gasto sanitario. El resultado es una versión punk de la cita de Keynes, en la línea de quienes cuelgan adaptaciones cursis de Serrat.

Tal vez los numerosos vídeos dramáticos de Aguiló sirvieron de casting para ganarle la vicepresidencia. En ellos desgrana perlas de su filosofía personal, como el impagable "todo tiene que ver con todo, pero no del todo". Y eso es todo. Debe ser la famosa agenda oculta del PP, recitada con tono sinuoso de monarca shakespeariano. El efecto es cómico, aunque ignoro si era el objetivo pretendido por el mejor actor del Govern.

En otro vídeo de autor, el vicepresidente parodia a Mark Twain, al declamar que "cuando te encuentras en el lado de la mayoría, es el momento de detenerte a reflexionar". Y si te encuentras del lado de la mayoría absoluta, ni te cuento. Omitiremos los devocionarios de Aguiló sobre el mercado de Hayek, para centrarnos en otro de sus monólogos, digno de Ingmar Bergman. "Amb el temps, tot, qualsevol cosa, tendeix a la normalitat". Impresionante, sobre todo para quienes desde la Universitat reprochan al responsable económico del Govern su posición a la derecha de Carles Delgado en materia lingüística.

Abunda el trabajo para un psicólogo, en los vídeos autobiográficos del vicepresidente. En el más curioso, se dirige pedagógico a sus alumnos. "Este mensaje es para recordaros que sería conveniente que colgáseis vuestra foto. Una comunicación ágil exige que sepamos con quién estamos hablando, quién es nuestro interlocutor. Si somos capaces de identificarnos, nuestras comunicaciones serán más productivas y los resultados que obtendremos de las mismas serán mucho mejores. Por tanto, os ruego que cuanto antes colguéis vuestra foto".

El vicepresidente muestra cierto desconocimiento del medio, el cargo le brindará numerosas oportunidades de pulimentar sus habilidades teatrales. Empeñado en librarse de su sambenito de buena persona, ha difundido en youtube una imagen de profesor despistado, la misma que convirtió la lectura de su tesis doctoral en una ceremonia accidentada. Se le llegó a plantear cuál era exactamente la posición que defendía, una ambigüedad perceptible también en los vídeos melodramáticos. Y aquí viene la pregunta clave, ¿le fiaría usted su dinero y su futuro económico a alguien así? Pues ya lo ha hecho.

Un poco demasiado mayores y fuera de forma para indignarnos, seremos Conformistas por los procedimientos habituales. El indignado de la semana es Miquel Ramis, que efectuaba declaraciones como vicepresidente del Govern in péctore y se ha quedado sin cartera. Bauzá –la mayoría de edad consiste en que ya podemos suprimir el José Ramón para identificarlo– aplica las recetas salomónicas de un tal Franco. Si se enfrentan dos sectores, Font contra Ramis, se les expulsa a ambos del paraíso.

Ramis disfrutó del premio de consolación de asistir al Consell de Govern celebrado en la sede del PP. Al margen de la farsa democrática y de la presencia del secretario general de un partido en la reunión, la ubicación contradice el principio de gobernar para el conjunto de la ciudadanía, que no es una concesión graciosa de Bauzá sino un imperativo de su cargo. Los demócratas se han olvidado de la democracia, por eso les importunan los Indignados.

La obligatoriedad de la cuota ibicenca y menorquina tiene sentido en un Govern de doce consellerias. Con sólo seis –hasta aquí, Bauzá cumple–, esa imposición supone otorgar un tercio de representación geográfica a un quinto de la población, cuyo voto ya pesa el doble que Mallorca. En un ejecutivo de esa magnitud sólo debería primar la calidad, con independencia de la cuna en Pollença, Alaior o Sant Antoni. ¿Se cumple este baremo? Biel Company sería el primer contraejemplo, tal vez se ganó el cargo al interrogar al hoy president sobre su vida privada, en una reunión con empresarios del sector agrícola.

Para confirmar nuestra independencia geográfica, celebramos desde aquí que el primer acto no oficial de Aina Calvo al ser desalojada de la alcaldía de Palma fuera un viaje a Helados Garrido del Port d´Alcúdia, en la misma tarde del sábado que saldó su destitución. No, no fue en bicicleta.

En uno de mis paseos por Palma para reencontrarme con las clases medias o incluso trabajadoras, compruebo que hay conductores de autobús que paran sus mastodontes en los pasos de cebra, en atención a las peatones. Pero también hay un conductor de la EMT que el pasado viernes por la tarde, en la zona de Poniente de la ciudad, llamó hasta cuatro veces por el móvil delante de los estupefactos viajeros. Una sola mano al volante, por curvas peligrosas. Estoy en contra de la delación, y ni siquiera me escandaliza que un imprudente arriesgue la vida de su pasaje, pero es inaceptable que un trabajador público sea desconsiderado con los ciudadanos obligados a soportarle. Un pasajero quiere denunciar. Le disuado. Conozco a Cort.

Reflexión dominical combustible: "Las obras de arte también pueden clasificarse por el tiempo que tardan en arder".