Mette-Marit se dio un fuerte golpe en la cabeza el pasado 20 de octubre en Kiev durante una visita oficial a Ucrania, lo que la obligó a suspender el programa de actos y reposar tres días antes de regresar a su país.

La esposa del príncipe heredero Haakon fue examinada luego por los médicos de la corte, que le dieron una baja de dos semanas que ahora se ha prolongado.

Durante ese tiempo Mette-Marit permanecerá descansando en el palacio de Skaugum y no participará en ningún acto oficial.