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Piragüismo

Tras la estela del oro de Marcus

El éxito de Walz en Río ha impulsado el número de practicantes en una Federación Balear que desde hace varios años ya aprovecha el tirón de Sete Benavides - Hay más de 600 palistas en competición y las licencias alcanzan las 1.500 fichas

Desbordados. Así están en la mayoría de los clubes deportivos de Mallorca que tienen en el piragüismo una de sus principales actividades.

El oro de Marcus Cooper Walz en Río 2016 ha disparado las inscripciones, preferentemente de niños y jóvenes, en cursos de aprendizaje. También se ha notado en las licencias federativas, un número que ya ha había aumentado en estos últimos años y que tras los Juegos Olímpicos ha superado las expectativas.

La temporada competitiva arranca en Balears a principios de octubre. Hace años se competía por años naturales, pero el hecho de que sea tras el verano cuando se producen las renovaciones de licencias -y fichajes por otros clubes- propició ya hace tiempo que se arrancara en otoño.

La regata de Portopetro suele abrir la campaña, que este año contará con 19 regatas en Balears. "El año pasado compitieron unos 600 palistas", explica Xavi Monroig, director técnico de la Federación Balear.

"Y si sumamos a quienes no compiten y las fichas de formación nos vamos a las 1.500 personas", añade. Y esta temporada hay que añadir el reclamo de la medalla de oro conseguida por Marcus Cooper al tirón que ya tiene de por sí Sete Benavides desde hace casi un lustro tras escapársele por dos veces el podio olímpico -en Londres 2012 y Río 2016- por milésimas.

Pero no solo en cantidad crece el piragüismo. El hecho de que hoy existan problemas en algunos clubes para cuadrar horarios, tanto en formación como en entrenamientos, propiciará que en pocos años aumente el nivel competitivo de los palistas en Balears.

Una previsión más que realista a tenor de lo que ya se ha vivido en el último decenio. "Hace ocho o diez años se viajaba a la Península a competir con un equipo formado por ocho o diez palistas. Ahora vamos con medio centenar", destaca Monroig, que sentencia: "Y solo van aquellos que tienen posibilidades de estar delante, de estar entre los veinte mejores o luchar por el podio".

El director técnico de la Federación Balear tiene claro que el esfuerzo de los clubes está siendo básico para que el piragüismo se mantenga a flote y con buenas perspectivas de futuro. "Y el hecho de que muchos clubes, como es el caso del Portopetro o el Palma, sean náuticos [principalmente son clubes de vela] nos da alas", asegura.

Pese a este refuerzo, un aspecto a mejorar es el apoyo económico. En este sentido, Monroig destaca que "la novedad es el patrocinio privado a deportistas individuales, especialmente en el kayak de mar".

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