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Gente en la sombra

Bel Calero: "La satisfacción personal de llegar a meta es bestial"

"A raíz de una lesión tuve que dejar el fútbol. En la rehabilitación empecé a hacer cinta y le cogí gusto a esto de correr"

La corredora Bel Calero llega a la meta el pasado fin de semana en Artà, donde ganó la Copa Balear.

­­Jugó a fútbol, el deporte que le gustaba y en el que era buena, tanto que llegó a ser internacional por España. Militó en el Collerense y Manacor femenino, entre otros equipos, y una lesión la condenó a dejar el balompié. Fue en octubre de 2014. En la recuperación empezó a hacer cinta, luego carrera continua cada vez con mayor recorrido. Se apuntó para probar en la prueba Tres Pins de Lloseta, y ganó como las siguientes. Desde ese día, hace ocho meses, su progresión solo ha crecido, tanto que se acaba de proclamar en Artà campeona de Balears de carreras de montaña y de la Copa Balear. Es la atleta Bel Calero (Santa Margalida, 1989) del club Mallorca Trail.

-De marcar goles a correr por la montaña. Menudo cambio.

-Fue a raíz de una lesión. Con el Collerense me lesioné ante el Valencia. Me rompí el peroné. La recuperación no fue como esperábamos y el hueso tardó en consolidarse. En la rehabilitación por mi cuenta empecé a hacer cinta y carrera continua. Luego fuí por terrenos más inestables como los alrededores del Castillo de Bellver. Al final el hueso consolidó pero ya le había cogido gusto a esto de correr.

-Esto fue en octubre de 2014. En apenas un año y medio ya se planta como campeona de Balears.

-Ha sido en un año y medio. Empecé a correr por hobby y en enero de este año lo hice de manera más seria y por la montaña. En febrero realicé mi primera carrera.

-Menudo potencial atesora, y usted sin saberlo.

-Se pone a reír-. No lo sé. Me imagino que tengo la base del fútbol. Siempre digo que tengo suerte de tener miedo en las bajadas. Comencé en Lloseta y luego la K-21. Las gané. Después no sabía que existía una Copa Balear y empecé con la primera carrera, la de Vall de Sóller,una de larga distancia de 22 kilómetros. También fuí primera. Fue cuando me planteé hacer las carreras de la Copa a ver cómo me va. Y al final ha ido todo rodado.

-¿Lo ha asimilado?

-Me viene un poco grande ahora, la verdad. Toca por el momento disfrutar y mejorar. Quiero aprender de mis compañeras que son muy buenas y tienen grandes cualidades.

-Usted ha destacado en dos deportes totalmente distintos, uno colectivo y otro individual.

-Siempre he dicho que el trabajo en equipo es básico en todos los aspectos de la vida. El haber jugado a fútbol me ha dado esa capacidad para valorar el trabajo en equipo. El correr, aunque pueda parecer que es un deporte muy individual, al final los entrenamientos los haces en grupo y durante las carreras hay mucha solidaridad. Por ejemplo, en Artà, donde gané la Copa, en el primer tramo fue junto a mí un compañero. Tener este apoyo es clave. Sí que es verdad que hay muchos tramos que vas sola pero eso va con la persona. Cuando jugaba a fútbol a mí me daba igual si las compañeras no se lo tomaban en serio. Tengo este carácter. Me lo tomaba muy en serio. En el fútbol necesitas al equipo para lograr un objetivo. En las carreras no lo necesitas pero si lo tienes te ayuda mucho.

-¿Cómo es el mundo de las carreras de montaña?

-Me he encontrado mucha solidaridad. Este mundo es muy bonito, respetuoso y se te valora en todo momento. Además, se valora igual al que queda primero como al que queda el cien, por ejemplo. Esto en fútbol no ocurre ya que o juegas o estás en el banquillo. Es una actividad en la que disfrutas. Duro pero muy gratificante.

-¿Compensa la dureza de esta disciplina?

-Es sobre todo muy duro. Durante una carrera, aunque sea una corta o una ultra, pasas por muchas fases y las tienes que ir superando, tanto las buenas como malas. Tienes que gestionar bien la carrera. La llegada es una satisfacción personal bestial. No lo he vivido en ningún otro momento. Llegas y te dices: “Lo he conseguido, he sido yo”.

-¿Y ahora qué?

-Lo primero que quiero hacer es descansar, que es una parte muy importante del entrenamiento. Llevo desde febrero sin parar. Después sobre la marcha. Seguir mejorando y aprendiendo. La próxima prueba es la Transvulcania en La Palma (Canarias). Ya nos hemos apuntado como club. Luego se verá cómo evoluciono. El primer año ha sido de reconocimiento y el segundo será de ver qué prueba me puede ir mejor y cómo enfoco el futuro.

­-¿Para correr por la montaña hay que ser de una ‘pasta’ especial?

-Bajo mi opinión y por lo que he visto como profesional de la actividad física -es licenciada-, cada corredor es un mundo. Los hay conservadores, los que empiezan con un ritmo alto, los regulares. Cada uno hace lo que considera mejor para él. Me considero una novata y estoy experimentando un poco. Tienes que poner seny en muchos momentos ya que no es lo mismo una carrera de 20 kilómetros que una de 42. Cada persona sabe qué ritmo puede imprimir y lo que puede durar a ese ritmo.

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