El mes de noviembre marca el inicio de la temporada de atletismo a nivel mundial y, por ende, de las pruebas de campo a través. En Balears el calendario de competiciones incluye dicha actividad hasta bien entrado febrero, reservando el mes de marzo para el Campeonato de España y, en el caso de que se dispute, el Mundial de cross, un evento que en las últimas ediciones se disputa cada dos años -anteriormente era anual-.
Mallorca cuenta con un calendario de pruebas a lo largo de estos meses que acogen categorías desde iniciación -los más pequeños- hasta las diferentes categorías de veteranos, con distancias tan variables que van desde los 300 metros para los menores en las primeras competiciones de noviembre hasta los 13.000 metros en categoría absoluta masculina en el mes de marzo.
En Balears, la afluencia de atletas que utilizan las pruebas de campo a través para la puesta a punto es muy numerosa, aprovechando que los meses de noviembre y diciembre cuentan con diversas pruebas celebradas a lo largo de las islas. Enero suele ser cita habitual a nivel insular para los Campeonatos de Mallorca, mientras que a nivel balear la cita para los campeonatos suele coincidir en febrero.
Este año el punto de encuentro para los mejores especialistas de Balears será en Eivissa el primer día de febrero.
Las pruebas de cross surgen originariamente en Gran Bretaña en el siglo XIX, creándose a principios del siglo XX el denominado cross de las Naciones, que posteriormente se convirtió en campeonato del Mundo de campo a través, con dominio muy variado de atletas de diferentes países. A partir de la década de los 80, se hizo patente el dominio africano principalmente con países como Kenia o Etiopía, a la que se han sumado Eritrea, Uganda, Marruecos o Argelia. Para aquellos especialistas en medias y largas distancias, el campo a través no sólo supone una preparación invernal de sus pruebas estivales, sino generalmente un periodo importante en sí.
En Mallorca, el crecimiento del número de practicantes del atletismo y la profusión de Escuelas en los diferentes clubes, hace que las jornadas dominicales de cross permitan ver pruebas con una numerosa participación, donde los jóvenes -y no tan jóvenes- compitan y disputan las pruebas de media y larga distancia en un entorno natural, con abundante público y que, además, les pueda servir como base preparatoria para la temporada estival donde, ya sea en pista o en ruta, continuarán con una segunda parte de la temporada que suele abarcar, generalmente, desde abril a septiembre.
