A diferencia de Barcelona, donde en el Raval disfrutan de una fábrica de los sueños que acoge a los espíritus sedientos de celuloide, la filmoteca de Mallorca continúa siendo una entelequia que periódicamente asoma su faz evanescente a las páginas de Cultura. Sin embargo, de vez en cuando se nos da la oportunidad de rescatar clásicos. El profesor de literatura y cinéfilo impenitente Antoni Figuera organiza un ciclo dedicado a La comèdia com a gènere que arranca esta misma tarde (jueves 16), y se prolongará hasta el próximo 2 de mayo, con sesiones a las 17.30, abiertas al público en general, en la Escola de Mitjans Didàctics del sindicato STEI (Mariano Canals, 13, Palma). El listado, de lujo: To Be or not To Be, Historias de Filadelfia, Con faldas y a lo loco, Cantando bajo la lluvia, Plácido, Desayuno con diamantes y Midnight in Paris.
Otro ciclo: De Ferran el Catòlic a Martí Luter: el pas de l´Edat Mitjana a l´Edat Moderna, en el Arxiu del Regne de Mallorca (Ramon Llull, 3, Palma), aprovechando que en 2016 se cumplieron cinco siglos de Fernando de Aragón y este año otros tantos de la Reforma luterana. Empieza el lunes 20, a las siete de la tarde, con la adaptación al cine por Gerardo Vera del clásico de la época La Celestina, de Fernando de Rojas. El reparto, un verdadero quién es quién del cine español: Penélope Cruz, Terele Pávez, Juan Diego Botto, Maribel Verdú, Jordi Mollá, Nathalie Seseña, Candela Peña, Lluís Homar... Seguirán 1492, La marrana, Los Borgia, Juana la Loca, Lutero y Un hombre para la eternidad, con entrada gratuita.
No hay dos sin tres. El Teatre Municipal Catalina Valls, en el número 9 del Passeig Mallorca de Palma, programa desde el miércoles 22 4 mirades sobre la Ciutat, es decir, la urbe vista en la pantalla desde otras tantas perspectivas: el turismo (Vacaciones en Roma), la integración y la solidaridad (Bienvenidos al Norte), la cultura y el patrimonio (también aquí, Midnight in Paris; qué pedazo de película) y el futuro y la sostenibilidad: Blade Runner, no podía ser otra. Seguimos soñando con ovejas mecánicas. Los pases, a las ocho de la tarde. Sólo hay que pasarse por la taquilla y pedir la invitación correspondiente.
