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Tinta fresca

Risa en la oscuridad

Risa en la oscuridad

La idea de Ante todo criminal le llegó a Juan Aparicio Belmonte como surgen muchas ideas, tras un golpe en la cabeza, "y no es broma. Frené en un semáforo bruscamente y al golpearme con el reposa-nucas, pensé que aquella idea un poco lejana y disparatada de escribir un relato corto sobre un millonario que quiere demostrar que existe una historia izquierdista del Real Madrid, ocultada por el poder, podría dar para una novela. Porque es verdad que el Madrid fue el equipo que más ligas ganó durante la república, y es verdad que sufrió una larga sequía de títulos durante la posguerra, con quien fuera su presidente, Sánchez Guerra, exilado en París". Poco a poco la novela fue "ganando cuerpo, lo cual quiere decir que se adentró en territorios complejos, como la metaliteratura, como el narcotráfico y otros elementos, el peso de la lectura y el arte en la sociedad actual, que siempre me han interesado, todo ello trufado con unos cuantos crímenes que tensan las relaciones laborales y sentimentales de sus principales protagonistas, y que me ayudaron a encauzar la trama y llevarla hasta el final".

¿Ha patentado la idea del autoespionaje? "Pues no, la verdad. Tampoco estoy seguro de que sea una idea original. Autoespiarse responde a ese afán que todos tenemos de saber cómo nos ven otros, de conocernos mejor. En el caso de la novela tiene que ver, además, con el miedo de un personaje a que una infidelidad que ha cometido haya dejado rastro en su vida, y por eso se somete al escrutinio de un detective. Luego la cosa se complica y aparecen muchos más detectives". El protagonista es escritor y "un pequeño camello, y realmente como oficio es ideal para un escritor, al margen de sus peligros indudables para la salud pública: tiempo libre, dinero y también estrés por miedo a la cárcel. El estrés es bueno para el escritor, favorece el afán de desahogarse en la hoja en blanco. Pero, vamos, no hay paralelismo entre el escritor de la novela y el autor ". ¿La parodia es la mejor forma de escribir algo muy serio? "No tanto la parodia en concreto, como sí el humor, que permite tratar asuntos muy serios sin caer en la solemnidad ni en la desesperanza y, también, por qué no, sin aburrir". Es inevitable pensar que la ficción ha modificado en algo su propia vida... "Sí. No sólo como lector, con las buenas novelas que he leído, y que ya forman parte de mi memoria y mi experiencia sustancial, sino como novelista, pues a veces he tenido la impresión, como le ocurre a algún personaje de la novela, de que lo que escribo se reproduce en mi vida, y por eso ando con mucho ojo cuando escribo".

¿Quién se lo pasará mejor, los antimadridistas o los madridistas? "Todos, si se me permite la respuesta tópica. Debo advertir que la novela no va solo de fútbol, ni mucho menos. Eso sí, en el plano futbolístico, también diré que soy madridista, aunque un madridista heterodoxo, seguramente, y que se lo toma todo con bastante buen humor y espíritu burlesco. Y del Sporting de Gijón, aunque mis primos viven en Oviedo". ¿Escribir es una forma de autoespiarse? "Es una manera de forzarte a descubrir qué llevas dentro, que tal vez se pueda llamar autoespiarse a esto, no sé. Es sobre todo una forma de pasar el rato. No creo en la trascendencia del acto de escribir. Creo en la trascendencia de algunas novelas memorables, pero no le concedo ningún tipo de aureola mítica al acto de escribir".

JUAN APARICIO BELMONTE

Ante todo criminal

SIRUELA, 236 PÁGINAS, 16,95 ?

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