Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Medio Ambiente

El gran bosque submarino

Balears se convierte en referente europeo en la protección y repoblación de las praderas de posidonia.

La posidonia puebla el fondo del mar balear. REE

El conocimiento y la sensibilización de la población balear con la Posidonia oceanica ha experimentado un crecimiento espectacular. De un total desconocimiento hace tan solo una década, se ha pasado a la redacción de un Decreto para su protección, a denuncias en las redes sociales de aquellos barcos que fondean sobre ella y de la consecuente actuación por parte de los organismos ambientales competentes.

Y es que la muestra de esta evolución es el Decreto para proteger la posidonia en Balears, que el pasado día 30 de octubre salió a exposición pública durante treinta días naturales, después de pasar por el periodo de participación, llevada a cabo por el Govern. De este modo, la Comunidad Autónoma con más superficie de praderas de posidonia del Estado, el 50% del total inventariado, será la primera en toda Europa en garantizar la protección de esta planta fanerógama, que es uno de los hábitats marinos más importantes, que disminuye la erosión de las playas y que mitiga el cambio climático, al captar dióxido de carbono. "El objetivo del Decreto es crear una regulación que compatibilice la existencia de actividades humanas con la protección de la especie y el hábitat estableciendo un marco jurídico homogéneo y regulando los usos y las actividades que puedan afectar a la posidonia", explican desde la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca.

Antes de salir a exposición pública, el proyecto de decreto pasó por dos procesos de participación durante los cuales se recibieron sugerencias de los agentes y los sectores implicados: náutico, conservacionista, científico y administraciones, entre otros. Así, en el proceso de participación previo a la elaboración de la normativa, que se vehicula a través del Portal de Transparencia, "se han recibido 753 sugerencias, mientras que en el proceso de participación previo a la tramitación ordinaria sobre un borrador oficial de la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca se han recibido 23 aportaciones, muchas de las cuales se han incluido en el texto final que sale a exposición pública", explican. Consecuencia de ello, se ha mejorado el artículo 2 (definiciones), la representación de miembros dentro del Comité Posidonia o los mecanismos de coordinación establecidos por el decreto con diferentes administraciones o consellerías y se han añadido algunas disposiciones que ayudarán a aplicar mejor el Decreto, en algunos casos de manera transitoria. También se han modificado la lista de zonas de alto valor y la de zonas a restaurar del anexo 1, se ha elaborado y añadido la cartografía de las zonas previstas en el anexo 1 y se ha añadido un tercer anexo, que hace referencia a la lista de la cartografía oficial actual previsto en el Decreto. Además, se han establecido equivalencias, a efectos de la cartografía, entre la cartografía derivada de este Decreto y las zonificaciones que establecen los planes de gestión de la Red Natura 2000, a fin de evitar el solapamiento de figuras.

Iniciativa pionera

Otra de las consecuencias de la importancia que tiene la posidonia en la sociedad balear es el convenio suscrito entre el Govern Balear y Red Eléctrica de España (REE). El objetivo del convenio es el desarrollo, en la bahía de Pollença, del proyecto el "Bosque marino de Red Eléctrica", consistente en la restauración de dos hectáreas de praderas de posidonia degradadas de la zona. El convenio establece la colaboración entre la Administración balear y Red Eléctrica para llevar a cabo el proyecto. REE, como titular de la iniciativa, aportará más de 500.000 euros para su desarrollo a lo largo de cuatro años mientras que la responsabilidad científica de su ejecución corresponderá al IMEDEA. Por su parte, el ministerio de Defensa pone a disposición del mismo el uso de parte de las instalaciones militares de la Bahía.

El bosque marino de Red Eléctrica tiene como objetivo la restauración de 20.000 metros cuadrados de una antigua pradera de posidonia, hoy degradada, ubicada en la Punta de l´Avançada, en la Bahía de Pollença, mediante el plantado de plántulas procedentes de semillas y fragmentos de Posidonia oceanica. El proyecto supone aplicar los resultados y la metodología obtenida del proyecto previo de I+D+i, desarrollado por REE y el IMEDEA del 2013 al 2016, en las Bahías de Santa Ponça, en Mallorca, y de Talamanca, en Eivissa, cuyas conclusiones indican que es viable técnica y económicamente proceder a restauraciones de praderas de posidonia. No existen, sin embargo, experiencias previas de una plantación de Posidonia oceanica en una superficie tan grande como la que se abarcará en la Bahía de Pollença, donde se procederá a la plantación de 12.800 plántulas de la especie.

La elección de la zona se produjo tras la valoración de diversas localizaciones ubicaciones y considerarse la calidad del agua y las buenas condiciones ambientales de la ubicación, la existencia de una zona de pradera degradada pero adecuada para su restauración, el ser una zona resguardada que permite la aplicación de medidas de gestión y, finalmente, la presencia de las instalaciones militares que permiten una buena logística para el cultivo de las plántulas en zona cercana a la plantación en el mar.

Las 12.800 plántulas se plantarán en grupos en forma de cuadrantes (nodos) de 40x40 cm o de 80x80 cm, con una estructura diseñada para el futuro crecimiento de la posidonia. Los nodos serán marcados y señalados para permitir su identificación, futuro seguimiento y análisis. Previamente, se procederá a la recolección de fragmentos de Posidonia oceanica producidos de forma natural por la dinámica marina, en especial tras los temporales de invierno y, a su vez, a la colecta de semillas de frutos maduros de la especie en primavera, época en que éstas se dispersan de manera natural.

El cultivo de semillas y fragmentos se efectuará en tanques sumergidos en el fondo del puerto del aeródromo militar del Port de Pollença. Se realizará un seguimiento constante de la evolución del cultivo, condiciones de temperatura, salinidad o, entre otros factores, luz. Posteriormente, se efectuará el plantado de manera natural, directa por parte de buceadores.

A lo largo de los cuatro primeros años se evaluará detalladamente el éxito de la plantación mediante el control de la supervivencia y crecimiento de los ejemplares trasplantados, seguimiento que se prolongará en los años sucesivos. También se evaluará la recuperación del ecosistema general, la biodiversidad asociada a la plantación de posidonia en la zona restaurada. El Bosque Marino de Red Eléctrica será, con independencia de su importancia desde el punto de vista biológico, un "laboratorio vivo" abierto a la comunidad científica.

El proyecto incluye también una evaluación de las emisiones de CO2 capturadas por el Bosque Marino de REE. En el medio marino, las praderas de angiospermas tienen una enorme importancia como almacenes de carbono orgánico, capaces de capturar el 10% del carbono anual de los océanos. Posidonia oceanica es la especie de angiosperma marina con una mayor capacidad de almacenaje y esta evaluación permitirá conocer la eficacia de la restauración de una gran pradera de la especie como proyecto de compensación de emisiones de CO2 y de lucha contra el cambio climático.

Vigilancia y educación ambiental

Para la correcta ejecución del proyecto se necesitará proteger los 20.000 metros cuadrados de plantado. Así, se balizará la zona y se efectuará un control del fondeo en la zona mediante vigilancia in situ y una campaña informativa sobre la importancia del proyecto en instalaciones náuticas, playas y establecimientos de la zona.

Uno de los ejes del proyecto es la educación ambiental, la concienciación de la importancia de los ecosistemas marinos y en especial de las praderas de posidonia para la conservación de la biodiversidad del Mediterráneo. Se establecerá un programa de aplicación en los centros educativos mediante formación en el aula, visitas de campo y la edición de material didáctico. A su vez, durante la vigencia del proyecto educativo, el Aula del Mar, dependiente de la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, albergará una exposición sobre el proyecto mediante paneles interpretativos y material audiovisual.

Compartir el artículo

stats